Luego de la detención de dos extranjeros por el asesinato del mayor y militar en servicio activo Paúl Osorio, el 10 de marzo pasado, uno de ellos recibió medidas sustitutivas.

Según el mayor Iván Naranjo, jefe de la Unidad de Muertes Violentas, el grillete que le colocaron al implicado dejó de dar señal de su ubicación y no se presentó a una audiencia estipulada para la mañana del viernes.

Aún no se conoce el paradero del sospechoso ni del dispositivo. “Hemos pedido informes al SNAI (Servicio Nacional de Atención a Privados de Libertad), pero no hemos tenido respuestas”, dijo el oficial.

Los dos sujetos fueron detenidos en una vivienda de El Comité del Pueblo, en el norte de la urbe, un día después del crimen. Allí encontraron indicios de que ambos estuvieron en el departamento de la víctima, a la que dejaron maniatada y desnuda en su cama.