La casa no estaba vacía como ellos lo esperaban. Dos hombres irrumpieron en el hogar de Felipe (nombre protegido), ubicado en el sector de Carcelén, en el norte de Quito, con el fin de apoderarse de las cosas de valor, pero se pegaron un fiasco y debieron irse sin su botín.

Los intrusos se habían pertrechado de varias bolsas y  herramientas con las que vulneraron las seguridades de la casa de dos plantas. Sin embargo, cuando lograron cruzar el umbral, notaron que la vivienda no estaba sola, como lo suponían.

Según Felipe, los tipos la tenían vigilada desde hace un par de días y cuando pensaron que todos los miembros de su familia se habían ausentado, aprovecharon para entrar. Sin embargo, en el interior, estaban su hermana y su sobrina, quienes, alertadas por los ruidos, salieron a ver lo que ocurría.

En ese instante y viéndose descubiertos, los hombres apuntaron a las dos mujeres con un arma de fuego y huyeron del sitio. Ni siquiera lograron arrebatarles sus pertenencias antes de dejar la vivienda. El hecho mantiene indignado a Felipe, sobre todo porque los implicados agredieron a las personas más vulnerables de su hogar.

Aunque al momento no se ha podido identificar a los responsables, el propietario del inmueble está seguro de que no pertenecen al sector, ya que el sitio los vecinos son muy unidos y suelen alertar sobre este tipo de incidentes.