El crimen animal ocurrido el pasado viernes 2 de agosto, en la Calle 10 y Avenida 9 del centro de Manta, provincia de Manabí, sigue causando llanto y dolor.

El número de animales muertos en aquel día fue de 17 gatos y un perro de raza pitbull; sin embargo, esa cantidad aumentó considerablemente en las últimas horas.

Así lo confirmó Marcos Ordóñez, representante del colectivo Animales Manta (AMAN), quien informó del hallazgo de más animales muertos a causa del envenenamiento, en terrenos adyacentes al lugar donde en primera instancia murieron las mascotas sobre una vereda.

“El veneno que se puso en pollo y carne ha sido fatal para esta colonia de gatos. La cifra aumentó a 36 mascotas muertas. Muchos salieron del lugar y fueron a morir a otros sectores , así lo comprobamos en un barrido que se hizo con varias fundaciones y ciudadanos animalistas”, explicó.

Con gritos de “¡Queremos justicia!”, “¡A la cárcel el asesino!” y “¡No más gatos muertos!”, centenares de mantenses participaron en una marcha convocada contra el maltrato animal.

Vestidos de blanco, con megáfonos y cartelones, los manifestantes se concentraron en la Calle 13 y Avenida 24, zona dinámica de la urbe porteña.

Susana Chávez, quien alimentaba a los gatos y protagonizó escenas de dolor aquella mañana, se sumó a esta actividad. Vestida de blanco gritaba con furia que se hiciera justicia y que no se permitan más hechos de estos o con similares características.

En la caminata pacífica también resaltaba una pancarta que hacía referencia a una recompensa de 1.000 dólares para quien dé información sobre el paradero del o los culpables de la masacre animal.

Representantes de las fundaciones e instituciones que motivaron la marcha indicaron que se han reunido con la policía y autoridades municipales para revisar los vídeos e identificar a los responsables.

Esta iniciativa culminó en la Plaza Cívica de Manta, donde los diferentes colectivos y fundaciones iban a socializar un proyecto de ordenanza en contra del maltrato animal y de cuidado de la fauna urbana.

Con perros y gatos en coches y brazos, los mantenses esperan que se ejecuten normativas para que este hecho que conmocionó al país no se repita.

El alcalde de Manta, Agustín Intriago Quijano, dispuso la contratación inmediata de un veterinario y un asistente para conformar una brigada de urgencia animal.

Así opina

“El veneno que se puso en pollo y carne ha sido fatal para esta colonia de gatos”.

Marcos Ordóñez

Representante de AMAN