Una ‘chupa’ en la Cárcel Regional de Guayaquil le costó el puesto a Fausto Rosero, coronel pasivo del Ejército, quien hasta la noche del viernes 26 de noviembre estuvo a cargo de la dirección de ese centro penitenciario. A las 00:03 del día siguiente, el Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI) confirmó su remoción.

La destitución llegó porque en sus últimas horas como funcionario, Rosero estuvo involucrado en un altercado con el agente Jorge Hernández, de la Policía Nacional, a quien habría agredido verbalmente y también habría intentado atacar a golpes.

Esto ocurrió en el kilómetro 15 de la vía a Daule, en el noroeste de Guayaquil, a 2 kilómetros de la Regional, luego de que Rosero fuera despertado para informarle que el vehículo en el que se movilizaba junto a Joffre García, conductor y también servidor del SNAI, iba a ser retirado por la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE).

¿Por qué? Porque habían impactado el costado izquierdo de un patrullero policial, pero ese problema iba a ser resuelto entre García y los agentes de Tránsito.

Rosero, en cambio, fue llevado a una Unidad Judicial para que se determinara si su actuación concurría en un delito o no. Sin embargo, al llegar a la audiencia de formulación de cargos, a la 01:30 del sábado, ya no era director de la cárcel, pues a las 00:03 había sido removido, y había llegado a un acuerdo con el agredido.

Durante la diligencia, pidió disculpas y dijo estar arrepentido.

Tras el hecho, el SNAI confirmó que Rosero y García ya no forman parte de la entidad y que el nuevo director es otro coronel en servicio pasivo: Mario Mendieta.

Diario EXTRA consultó al SNAI qué ocurrió dentro de la cárcel, porque el comandante zonal de la Policía, general Fausto Buenaño, confirmó que Rosero salió alcoholizado del centro de reclusión.

¿Hubo ‘fiestita’? Hasta el cierre de esta edición no se dio una respuesta.