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Guayaquil: Fundación ‘camuflaba’ supuestas clínicas de rehabilitación
Siete jóvenes murieron en uno de sus locales, que debía brindar ayuda a personas con discapacidad, según los estatutos de su creación.
La fundación Súmate a la Vida, en cuyas dependencias siete jóvenes con adicciones a las drogas fallecieron la tarde del martes 1 de marzo, sí existe y consta como tal en el Sistema Unificado de Información de las Organizaciones Sociales (Suios), de la Secretaría de Derechos Humanos.
Sin embargo, cuando fue constituida en octubre de 2020, no tenía como finalidad convertirse en una clínica de rehabilitación, porque tampoco contaba con los permisos, sino en un centro que brindaría ayuda a personas con discapacidad, según consta en los registros.
Para quienes habitan alrededor del establecimiento, que se incendió en la calle Q, entre la 17 y la 18, en el suburbio de Guayaquil, el sitio siempre fue un centro para el tratamiento de drogodependientes, desde que se asentó en la barriada hace aproximadamente diez meses. Así lo confirmaron los lugareños, al ser consultados por EXTRA.
Lo mismo contaron quienes habitan en la calle 41, entre García Goyena y Camilo Destruge, dirección que consta como sede de la fundación en los estatutos. Augusto Tumbaco, un residente, confirmó que en una casa que alquilaban también funcionaba una supuesta clínica de rehabilitación, que hace aproximadamente ocho meses desapareció del lugar.
La mañana del viernes 4 de marzo, un equipo periodístico de EXTRA constató que el inmueble es una casa de alquiler que actualmente está habitada por personas naturales.
Guayaquil: Clamaron ayuda pero murieron dentro de centro de 'rehabilitación'
Contacto
En los documentos de la fundación existen dos números telefónicos de contacto, pero al marcarlos, en ambos se escucha directamente un mensaje de la operadora. Por eso no fue posible contactar a los responsables de la entidad, para que den su versión de por qué funcionaban supuestas clínicas clandestinas en lugares destinados a brindar ayuda a personas con discapacidad.
En los escritos legales constan: Jorge Zambrano como representante legal; Cristian Viteri, Miriam Molina y Alex Islan como directivos; además de Medardo Campoverde, Julio Pachay y Raúl Campoverde como miembros.
El registro de esta entidad tiene vigencia hasta el 15 de diciembre del 2025. (SCM)
