A Pedro Miguel Falconí Bravo sus verdugos lo esperaban afuera de su casa. Al hombre le dieron los buenos días a punta de plomo en el sector Jaramisol, cantón Jaramijó, de la provincia de Manabí.

Eran las 08:30 de hoy 12 de octubre de 2020, cuando la bala zumbó en la barriada. Los atemorizados moradores salieron de sus domicilios y se hallaron con la sangrienta escena. El vecino Falconí estaba dentro de su carro herido de bala.

Según las versiones que se vertieron en el sitio de los acontecimientos y de lo que informó el coronel Mauricio González, jefe policial del Distrito Manta, el hecho se trató de un asesinato al estilo sicariato.

“Salió de la casa en el auto, avanzó una persona y lo abordó. Luego pasa una moto con dos sujetos, quienes le propinaron varios impactos de proyectil de arma de fuego. Según Criminalística se usó una de 9 milímetros”, detalló la autoridad policial.

El ciudadano fue auxiliado por sus familiares, quienes lo llevaron a una clínica, donde a los pocos minutos anunciaron su fallecimiento.

Los deudos protagonizaron escenas de dolor afuera de la vivienda. Lloraban de forma inconsolable cuando por vía telefónica se enteraron que los médicos no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

El automóvil color azul, de placa MBE-1023, quedó en plena calle, con evidencias de disparos en el vidrio de la ventana donde se ubica el conductor.

“Por la violencia que han usado en este hecho se presume que se trataría de un ajuste de cuentas. Nuestras unidades especializadas trabajan en las pericias para dar con los responsables de este crimen”, añadió Mauricio González.

El occiso no registra antecedentes penales y, según reveló un conocido que prefirió el anonimato, se dedicaba a labores relacionadas con la pesca. (AG)