La autenticidad es lo que Eduardo y Danilo Miño Naranjo, dicen, les ha permitido, durante 64 años seguir vigentes en la interpretación de la música ecuatoriana.

Con 84 y 83 años respectivamente, los cantantes declaran a EXTRA que, pese al paso del tiempo, ellos siguen conservando intactas sus voces, lo que se podrá apreciar en el concierto que ofrecerán hoy sábado 18 de junio, desde las 20:00, en el Teatro Centro de Arte de Guayaquil.

“Dios es grande con nosotros, porque mantenemos la misma tesitura, no ha disminuido como suele suceder en un cantante con el devenir del tiempo”, explica Eduardo, quien agrega con humor que eso se lo deben “a la buena conciencia”.

Danilo añade que siempre han tenido una vida sin excesos. “No tomamos, no fumamos, ni decimos malas palabras”, indica entre risas. “Y de lo otro, solo de vez en cuando”, agrega con alegría su ñaño.

Originalidad

Los hermanos no bromean cuando cuestionan a los cantantes que, con el afán de ‘refrescar’ la música nacional, le quitan su esencia.

“Hay cantidad de artistas que da satisfacción escuchar, pero hay otros que por ganarse su plata han desmejorado nuestra música, han desvirtuado canciones tan emblemáticas como ‘Vasija de barro’, que la convirtieron en cumbia”.

Eduardo también se declara en contra de aquellos que lo hacen. “Estoy en total desacuerdo con eso, lo mejor es tener un sello de autenticidad. Así es como surge un cantante”.

Un ‘rayón’ al reguetón

Para ellos, el artista nace, no se lo fabrica con la tecnología. “Esos son cantantes de probeta, pero intérpretes de corazón como un Julio Jaramillo, una Olguita Gutiérrez o Fresia Saavedra son otra cosa”, comenta Eduardo.

En tanto que Danilo sostiene que sin originalidad no se puede llegar a ningún lado. “De la esquina no pasan, porque solo prevalece lo auténtico”.

El pasillo de sus vidas

Uno de los pasillos que no pueden faltar en el repertorio del dúo, cuenta Eduardo, es ‘Tú y yo’, con el cual en 1964 ganaron el II Festival de la Canción Iberoamericana (desde 1972 cambió de nombre por OTI), en Barcelona, España. Ganaron las cuatro medallas del festival, recuerdan.

“De la gama de canciones que hemos grabado, todas han sido muy beneficiosas para nosotros. Por ejemplo, ‘Sin tu amor’ fue el primer pasillo que grabamos cuando empezamos y fue aquí en Guayaquil”.

La nueva grabación de los Miño es el pasillo ‘Rosa’, que forma parte de una producción internacional que incluirá a los 10 mejores artistas de Iberoamérica.