“No defiendo a mi hermana, pero sí puedo decir que antes de juzgarla debemos conocer su historia. Está muy arrepentida por lo que le hizo al hijo e incluso hasta ha intentado suicidarse”, comentó Gabriela Zambrano.

La tía del menor cubre los gastos médicos del pequeño de cinco años, quien está recluido en el Hospital Docente Ambato, por el castigo que le habría impuesto su progenitora.

La mujer de 20 años se molestó porque el niño habría roto un billete de 10 dólares. Cegada por el coraje del momento, habría tomado un cucharón caliente y se le colocó en los glúteos.

El hecho fue reportado el 20 de octubre, después de que la abuela materna se percató de las heridas que tenía el menor en sus partes íntimas.

El pequeño fue internado y se recupera de manera satisfactoria, aseguró la tía.

Intentó suicidarse

Gabriela lamentó el castigo, pues considera que fue excesivo, pero a la vez está preocupada por el destino de su ñaña.

“Mi hermana tuvo a su hijo muy pequeña, a los 14 años, y le ha tocado criarlo prácticamente sola. La gente en vez de juzgarla debería ayudarla de manera psicológica, ya que ha intentado suicidarse”, manifestó la consanguínea.

Agregó que han perdido el rastro de su familiar desde la tarde del martes 26 de octubre, cuando la Policía de la Subzona de Tungurahua en un comunicado informó que empezaron las investigaciones y que se emitió una boleta de captura.

“En la cárcel me matan a mi hermana y ahí quién se hará cargo de sus hijos”, señaló Gabriela.

El coronel Luis Villar, jefe de la Subzona de Policía en Tungurahua, informó que el caso lo están investigando Dinapen y la Junta Cantonal de Derechos del Menor y de acuerdo con los resultados determinarán iniciar el proceso judicial.

De su parte, la psicóloga Ivonne Vargas indicó que en muchas ocasiones los padres que actúan agrediendo de manera brutal a sus hijos vienen arrastrando patrones de violencia y deberían recibir tratamiento profesional.