Familiares de los integrantes del equipo periodístico de El Comercio dieron sus primeras declaraciones en el aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, el viernes 22 de junio de 2018, tras conocerse la noticia del posible hallazgo de los cuerpos de los tres trabajadores de ese diario.

Desde allí partieron a Cali, Colombia, donde fueron trasladados los cuatro cuerpos encontrados en una zona rural de Tumaco, por miembros de la Policía de ese país.

Tres de los cadáveres corresponderían a Javier Ortega, Efraín Segarra y Paúl Rivas, secuestrados el pasado 26 de marzo en Mataje, provincia de Esmeraldas, y posteriormente asesinados en manos del Frente Oliver Sinisterra.

Una probabilidad que el ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, califica de “altísima”, según explicó durante una declaración a periodistas en la Base de la Policía de San Luis, municipio del departamento del Tolima, en el centro del país.

Coinciden piezas dentales

En horas de la noche el ministerio de Defensa colombiano informó que las “cartas dentales dan más certeza sobre las identidades de los cuerpos de los periodistas ecuatorianos encontrados, al 99%”. Sin embargo, dicha información fue desvirtuada —a la mañana siguiente— por el Director Regional del Instituto de Medicinal Legal y Forenses de Cali, quien dijo desconocer el origen de esa información, según información de la Secretaría de Comunicación ecuatoriana.

Por su parte desde la Secretaría de Comunicación ecuatoriana manifestaron que hasta las 18h30 se continuaban con la toma de muestras de sangre y entrevistas a familiares del equipo periodístico.

Ratificaron que el proceso se realizaba con la finalidad de recabar información que determine si los cuerpos encontrados pertenecen a Ortega, Segarra y Rivas.

Funcionarios y parientes están en Colombia

Un total de 25 personas partieron el viernes hacia la ciudad colombiana para participar del proceso de análisis y reconocimiento de los restos. Entre los funcionarios que asistieron están Jorge Costa, secretario nacional de Inteligencia; Nelson Villegas, comandante general de la Policía Nacional y Wilson Toainga, fiscal del caso.

Asimismo, por cada fallecido, viajó una comitiva de parientes —conformada por 11 personas— con el objetivo de entregar muestras para el cotejo de ADN (ácido que contiene información genética). Christian Segarra, hijo del conductor asesinado, detalló que aguardarán en suelo caleño los resultados de esas pruebas.

Por su parte, el viceministro de Movilidad Humana, Santiago Chávez, informó que se coordinan con la Cancillería colombiana “todas las acciones que sean necesarias para llevar adelante los procedimientos para la repatriación de los cuerpos en caso que los análisis científicos resulten positivos”.

Un mensaje de Efraín

El hijo de Segarra habló de una persona que mantuvo una “relación cercana” con su padre durante los 19 días de secuestro en la frontera, a la que —explicó— el conductor del diario capitalino le dejó un mensaje: “no sé cuál es este mensaje, pero eso es lo que yo quisiera investigar”, dijo y aseguró que era uno de los individuos con los que su progenitor “estuvo esos días”.

No olvidaron a la pareja secuestrada

Los familiares de los trabajadores del rotativo capitalino señalaron que los parientes de Katty Velasco Pinargote y Óscar Villacís Gómez, una pareja de ecuatorianos también secuestrada en la frontera con Colombia en abril y cuyo paradero se desconoce, les pidieron llevar su caso a las autoridades del país vecino.

Velasco y Villacís “siguen secuestrados y no podemos permitir que eso continúe así y no podemos permitir que sus familias no reciban información y no tengan a quién preguntar dónde están”, reclamó Yadira Aguagallo, pareja de Paúl Rivas.

Cali cuenta con equipos especiales para identificar restos

Alexander Durán, secretario de Salud de Cali, explicó esta mañana por qué los cuatros restos hallados ayer en la zona sur de Colombia (fronterizo con Ecuador), son trasladados desde Tumaco hacia la capital del departamento del Valle del Cauca.

“En Cali se ubica el centro de mayor complejidad de medicina legal del suroccidente colombiano. Aquí se cuenta con los equipos, con la cualificación del talento humano para la identificación de cadáveres, especialmente de esos cadáveres que tienen el largo proceso de estar expuestos al aire libre”, detalló.

Durán dijo que el centro forense caleño está equipado con laboratorio para pruebas de ADN, antopometría (estudio de medidas del cuerpo), carta dental y diseño. Además, en estas instalaciones existen máquinas y personal especializado para calcular los aspectos físicos de las personas.

Sobre la duración del proceso de identificación de los cuerpos, Durán dijo que dependerá del sitio donde estuvieron, la disposición de los mismos y si fueron afectados por animales (roedores o insectos).

“Dependiendo de cómo lleguen los cuerpos aquí se utilizarán las técnicas necesarias para dar claridad de quienes son”, añadió. Si se realizan pruebas de cultivo o proyecciones, los resultados “tardarán más tiempo”, indicó.

La alerta llegó por redes sociales

La noticia sobre el posible hallazgo la dio Juan Manuel Santos, presidente saliente de la nación vecina. El comunicado lo hizo a través de su cuenta de Twitter, la tarde del 21 de junio.

Las familias de los ecuatorianos estaban molestos porque esta fue la única manera en la que se enteraron de la novedad: a través de redes sociales. Criticaron que no hubo información proporcionada por canales oficiales para corroborar lo acontecido.