Transcurrieron 104 días para que los familiares de Ángel José García Tomalá, de 44 años, al fin logren ubicarlo. Y aunque tenían la esperanza de encontrarlo con vida su hallazgo ocurrió en la morgue del hospital General del Guasmo Sur de Guayaquil.

García estaba desaparecido desde el pasado 30 de diciembre. Los amigos con quienes disfrutó de una reunión lo vieron por última vez en la cooperativa 25 de Enero, situada en el sur de la urbe. La mañana de aquel día tomó un taxi y pidió que lo trasladaran hasta las calles 9 de Octubre y Esmeraldas (centro).

Marcos, el menor de sus cinco hijos, contó que el 1 de enero colocaron la denuncia por la desaparición de su padre. Aunque ellos iniciaron una búsqueda particular en hospitales, cárceles y hasta en la morgue.

“La Policía hizo una búsqueda extensiva en casas de salud. Finalmente lo hallaron en la morgue del hospital del Guasmo. Allí le dieron un informe que indica que el 30 de diciembre un paciente llegó escopolaminado y falleció a las 22:00 por un infarto. Nosotros fuimos cuatro veces y no nos dieron información”, explica Marcos. 

Recordó que su progenitor quien el próximo 8 de mayo cumpliría 45 años  había planificado pasar el 31 de diciembre en la casa de un pariente, pero que les causó extrañeza, porque nunca llegó. "Ese día lo esperamos. Mi papá ya nos había confirmado su asistencia y nos sorprendió su ausencia", lamentó.