El tatuaje de un crucifijo en el costado derecho de su cuello sería la marca con la que los familiares de Kevin Daniel Pin Pincay podrían identificarlo. Sin embargo, sus asesinos no solo lo habrían decapitado, también cercenado esta parte del cuerpo, y eso hace más difícil reconocerlo.

Dos cabezas, una de ellas presuntamente la de Kevin Daniel, de 22 años, fueron halladas la noche del domingo en el bloque 1 de Paraíso de la Flor, en el noroeste de Guayaquil.

El mismo día del hallazgo, su progenitora se acercó al sitio donde fueron encontradas las dos piezas anatómicas para confirmar si una de ellas era la del cuarto de sus cinco hijos, quien fue secuestrado la tarde del pasado sábado.

Con su voz entrecortada, la empalmense, de 49 años, relató que su muchacho trabajaba como tricimotero y que el día de su desaparición se encontraba con un amigo, quien también realiza esta labor, en el mismo sector donde aparecieron las dos cabezas.

“Mi hijo se ganaba la vida conduciendo una tricimoto, ese día por acortar camino tomó una vía alterna, allí fue interceptado por varios sujetos. Ellos no solo se llevaron su herramienta de trabajo, también a él y a su amigo. Comencé a angustiarme porque ya eran más de las 15:00 y mi hijo no llegaba a almorzar”, manifestó la progenitora, mientras junto al padre de su vástago aguardaba por información que le permita confirmar si uno de los cráneos es el de su Kevin.

Manifestó que se enteró del hallazgo de las dos cabezas por amigos de su hijo, quienes fueron a su casa para avisarle que en un sector apartado, en medio del monte, habían encontrado los restos humanos.

“No aparece la tricimoto. Ruego a Dios que no sea mi hijo, es imposible reconocerlo a simple vista. Los padres del otro muchacho afirman que uno de los cráneos es el de su hijo, también desaparecido. Eso me hace pensar que una de esas cabezas es la de mi Daniel”, expresó con tristeza.

Una fuente policial reveló que los rostros de las víctimas tenían huellas de haber sido atacadas con arma blanca y que fueron cercenadas desde la raíz de la cabeza, por lo que carecen de cuello.

El otro fallecido podría tratarse de Carlos Adrián Menéndez Domínguez, quien acompañaba a Kevin Daniel el día del suceso. Familiares de ambos denunciaron su desaparición. (AEB)