Los disparos acabaron con una conversación y la vida de dos amigos. Sobre una vereda quedaron sus cuerpos, uno a lado del otro, mientras los verdugos huyeron sin ser identificados.

El mortal atentado se suscitó aproximadamente a las 21:45 del sábado 26 de junio, en el barrio Agua Potable del cantón Chone, provincia de Manabí.

A esa hora, quienes caminaban por la calle se tiraron al suelo, otros se escondieron tras los postes de energía o salieron en precipitada carrera por miedo a que uno de los disparos continuos que hicieron contra las víctimas, los alcance también a ellos.

Los familiares desesperados se aferraban a los cuerpos. Gritos ensordecedores se escucharon por la calle Ramos Iduarte, de la urbe chonense. Se preguntaban y miraban al cielo pidiendo explicaciones del porqué de lo acontecido.

Nadie pudo hacer nada por los dos amigos. Elvis Fabián Esmeraldas Rosado, de 30 años, y Darwin Leonel Chila Vera, de 21, habían sido asesinados, de acuerdo con las características del hecho, al estilo sicariato.

La barriada salió de sus casas para conocer sobre la balacera. Los agentes de la Policía cercaron la escena, querían evitar que los curiosos perturben elementos relevantes para la investigación.

Según informaron, Juan Esmeraldas, padre de una de las víctimas, fue quien envió la alerta de lo ocurrido. El hombre escuchó una ráfaga de disparos y al salir de su casa se encontró con el cuerpo de su hijo y el de un amigo, con varios impactos de arma de fuego.

El entristecido ciudadano manifestó también a los peritos que no conoce quiénes serían los causantes del doble crimen ni en qué se movilizaban.

Los investigadores recabaron los indicios balísticos y estaban por revisar cámaras de seguridad para identificar a los responsables.

Varios operativos se realizaron tras el hecho sobre vías de salida de la ciudad, sin embargo, no hay información sobre detenidos.