José Francisco Cuenca Japa, de 26 años, no pudo superar la adicción al alcohol y las drogas, al punto de que estas sustancias lo habrían ayudado a entrar en una profunda depresión que lo impulsó a tomar una fatal decisión: quitarse la vida.  

El hombre trabajaba en una empacadora, ubicada en el cantón El Guabo (provincia de El Oro). El 16 de agosto, sus compañeros, al ver que no bajaba a realizar sus labores, se quedaron ‘fríos’ cuando al asomarse por una ventana lo vieron sin vida, colgando de un gancho.

Nadie podía ingresar a dicha habitación porque el joven suicida habría colocado candados.

Alberto Cruz, amigo de infancia del ahora fallecido, confesó que este siempre le hablaba de la muerte. 

"Yo le decía que no piense en ello, ya que la vida es hermosa”, recordó Cruz  “(José Francisco) arecía entender, pero ahora mi body se suicidó...”, agregó Cruz.

Agentes de la Dirección Nacional de Investigación de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Secuestro y Extorsión (DINASED), recabaron evidencias en el lugar para tratar de esclarecer este supuesto caso de suicidio.

Mientras eso ocurría amigos y familiares se mostraron nostálgicos en sus redes sociales. “Aún no asimilo esto que ha pasado mi hermano, tus razones tendrás, mi llave. Pero tuviste los cojones de hacerlo, nos dejaste herida el alma”, posteó Diego Cojimies, con quien 'peloteaba' en la adolescencia.

Mariana Zhunio indicó que la última vez que vio a José fue cerca de su lugar de trabajo. Ella vive cerca del sector donde se reportó la tragedia y quedó consternada. “Es una pena, era una persona tranquila. Pero uno nunca sabe las penas que lleva por dentro la otra persona”, aseguró.