Alrededor de 64 personas fueron detenidas la madrugada del 31 de marzo por la Policía Nacional del Perú en una casa del distrito de Chaclacayo, una zona residencial y campestre al este de Lima, mientras celebraban una fiesta, a pesar del toque de queda impuesto por la pandemia del covid-19.

Diarios como La Nación informaron del acontecimiento y señalaron que jefe de la brigada contra la criminalidad extranjera, coronel Víctor Revoredo, declaró que la policía encontró en el lugar droga y una pistola Glock abastecida con municiones.

Agregó que entre los detenidos hay peruanos y venezolanos, algunos de los cuales pueden estar vinculados con el delito de sicariato, dado que vestían camisetas con la imagen de una persona apodada Wolfita, fallecida en Lima como presunta víctima de sicarios.

La Policía peruana coordina con la División de Homicidios de la Policía de Venezuela para verificar los antecedentes e identidad de los detenidos.

Los adultos detenidos en Chaclacayo fueron trasladados a la Dirección de Investigación Criminal en Lima para ser investigados por tráfico ilícito de drogas, peligro común y tenencia ilegal de armas de fuego, mientras que cuatro menores de edad serán entregados a sus padres por el Juzgado de Familia.