La migrante ecuatoriana Miryam Alicia Paguay Mejía, de 21 años, quien estaba reportada como desaparecida, habría fallecido en las aguas del río Bravo, en la frontera de México con Estados Unidos.

La noticia, que no ha sido confirmada de manera oficial por las autoridades ecuatorianas, fue dada a conocer por la publicación Monitoreo Laredo, en su página de Facebook y en la red social Twitter.

Según este medio, el cadáver de una mujer -la víctima número 12 en lo que va del año en este río- fue rescatado por personal del grupo acuático de Bomberos a la altura de los puentes internacionales que unen a Nuevo Laredo con Laredo, Texas. Agrega que “autoridades ministeriales” informaron que el cuerpo pertenece a una mujer de nombre Miryan Alicia Paguay Mejía, de 21 años, originaria de Guamote, en Chimborazo, Ecuador.

Luego del rescate, el cuerpo habría sido llevado hasta el lugar conocido como El Patinadero, a espaldas del Parque Viveros de esta frontera, donde lo entregaron a las autoridades ministeriales.

Miryam Paguay había sido reportada como desaparecida por sus familiares desde el pasado mes de abril. Según denunció en su momento la organización 1800Migrantes, ella viajaba con un grupo de al menos 17 personas de varias nacionalidades, pero fueron sorprendidos por un grupo narcoterrorista de los Zetas y ellos y, en su desesperación, por escapar se lanzaron al peligroso río que en esta época está crecido por las lluvias.

Además, de Miryam, los familiares han presentado en las coordinaciones zonales de la Cancillería la solicitud de búsqueda de otra ecuatoriana, Sara Elizabeth Sagñay Sagñay.

Desde la Cancillería ecuatoriana aún no llega confirmación que determine que el cadáver hallado el fin de semana se trate de Miryam Paguay.

La migración no se detiene

El pasado 2 de mayo de 2019, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana dio a conocer que el Consulado del Ecuador en Houston informó sobre la detención por parte de las autoridades migratorias estadounidenses, de un tráiler de transporte de verduras procedente de México, en cuyo interior se encontraba un numeroso grupo de migrantes -108 personas- entre ellos cuatro ecuatorianos.

Dicho vehículo intentó cruzar la frontera mexicano-estadounidense y fue detenido en la localidad de Mac Allen, Texas, Estados Unidos de América, la madrugada del 2 de mayo de 2019. Tal como se aplican los protocolos para estos casos, una vez confirmada su identificación, las autoridades norteamericanas procederán con su deportación.