Un comunero que llevó a sus animales a pastar encontró el cadáver de una adolescente en un terreno baldío del barrio San Alfonso de Cutuglahua, en el cantón Mejía, al sur de Quito.

El hombre alertó del hallazgo al ECU-911 el jueves 23. Cuando llegó el paramédico solo confirmó que la chica, de 13 años, estaba muerta. Además, corroboró que la víctima tenía huellas de violencia en su cuello y otras partes del cuerpo.

Miembros de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida (Dinased) llegaron al lugar. Según las primeras indagaciones y el examen forense, la chica habría sido abusada sexualmente.

La víctima había sido reportada como desaparecida el miércoles 22 de diciembre. Los familiares de la muchacha contaron a la Policía que venía desde Machala. El último rastro de la chica fue que llegó a la terminal de Quitumbe, sur de la capital.

Su cuerpo fue trasladado hasta el Departamento de Medicina Legal y ayer sus familiares lo retiraron para velarlo.

Suicidio

Un día antes a este hallazgo, la hermana mayor de la víctima se habría ahorcado porque no soportó, al parecer, que su hermana había desaparecido.

Según Walter Toapanta, teniente del Distrito Quitumbe, la joven, de 19 años, se había suspendido con unas sábanas desde la cama de su domicilio, ubicado en un conjunto de Ciudad Jardín, a unos 17 kilómetros de donde encontraron el cuerpo sin vida de la menor.

El oficial mencionó que las ñañas vivían por separado. La chica a la que le hallaron en el lote residía con su madre en La Argelia, sur de Quito, mientras que la joven que supuestamente se suicidó estaba bajo el cuidado de su papá.

Agentes de la Dinased investigan para conocer quién habría abusado y asesinado a la menor de edad.