La familia Gavela ha destinado los últimos años a recuperar lo que ha perdido en las lluvias... Su casa fue la más afectada en la última inundación del 31 de julio pasado.

Pero su desgracia no termina allí. Lo poco que lograron extraer del lodo les robaron el fin de semana pasado.

Blanca Gavela contó ayer a EXTRA que varios técnicos de la Prefectura de Pichincha estaban reparando algunos de sus artefactos. “Pudieron arreglar la lavadora”.

Además, rescataron un televisor y dos motores de licuadora para ver si podían funcionar. Todo eso se lo llevaron los choros aprovechando la oscuridad de la noche. “La tele no creo que funcione porque le entró el lodo. Ni siquiera se percataron de eso”, agregó.

Es por ello que a pesar de que su casa aún no está apta para ser habitada, la familia volvió. “Nos queda cuidar aunque sea las cobijas”, relató.

UNA TRAS OTRA

La moradora explicó también que esta no es la primera vez que deben volver a levantarse entre el lodo. “Con esta ya son tres veces. Las anteriores autoridades solo vinieron a limpiar y ya”, espetó.

Los ocho miembros de esta familia se quedaron con la ropa que llevaban puesta. Tampoco tienen con qué trabajar.

“Mi esposo, que hacía trabajos de plomería, albañilería y pintura, perdió todas sus herramientas”, comentó la afectada.

Por ahora, duermen en colchones y cocinan en ollas y una cocineta donadas.