Un bastón lo acompaña siempre al caminar. Sus pasos son lentos y hace pequeñas pausas para tomar aire.

Se agita un poco, pero infla su pecho en señal de respiro y continúa. De su rostro no desaparece la sonrisa hasta que esta se convierte en una señal de alivio porque encuentra reposo en un amplio sillón.

Allí, Alci Acosta, el famoso cantante colombiano que en noviembre próximo cumplirá 80 años, conversa con EXTRA y reconoce que “el tiempo ha pasado”.

Está consciente de que en algún momento llegará la hora de descansar, no solo de la música sino también del mundo terrenal.

“Quiero llegar a los 90 años, pero lo más importante es con salud”, confesó el intérprete de la popular canción ‘La copa rota’, a quien no le gustaría vivir más de eso.

A la muerte no le tiene miedo, porque sabe que todo aquel que nace en algún momento debe dejar de existir. “Ojalá me vaya cuando esté bastante viejito y no me dé cuenta de que me morí”, exclama.

Entre risas, dice que a los 100 años “ya hasta el agua se mastica”, por lo que cree que le queda una década más de vida y espera poder “cumplir esa meta”.

Aunque aún se sube al escenario y comparte con el público gran parte de su repertorio, del que destacan melodías como ‘Papel de la calle’ y ‘Traicionera’, en sus planes está retirarse.

Algo que quiso hacer cinco años atrás, pero el público no se lo permitió y tampoco él decidió hacerlo por completo, porque no sabía qué iba a hacer una vez fuera de los escenarios.

Incluso, en la actualidad no tiene claro qué es lo que desea, lo único certero es que espera montar un negocio para mantenerse distraído.

No imagina sus días sentado en una mecedora de su casa. Aunque desea reposar, también busca hacer algo para no estar aburrido y tener una fuente de ingresos económicos, acota.

Entre las cosas que ha pensado está montar un almacén de repuestos de motocicletas.

En Soledad, poblado del departamento del Atlántico, en Colombia, existen muchas mototaxis, por lo que ve en los conductores y dueños de ese medio de transporte a potenciales clientes, comenta.

Alcibiades Acosta, conocido como El Checo, es su hijo y tiene un local en Barranquilla en el que usualmente hacen recitales musicales, por lo que a Alci también le agradaría asociarse con su heredero para ampliar el negocio y quizá extenderlo a otras ciudades colombianas.

Mientras alguno de sus planes se consolida, Alci Acosta afirma que seguirá cantando boleros, como lo ha hecho desde 1957, género musical al que definió como “inmortal”.