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Buena Vida

Las 10 creencias más raras que la gente solía tener

Antes, con la falta de información al alcance de la mano, era más fácil tomar como ciertas cosas que hoy sabemos falsas.

Imagen hadas
En la Edad Media se creía que las ‘hadas’ robarían a tu bebé y lo sustituirían con una copia.Wikimedia Commons.

1. Una cura eléctrica para la impotencia

Cuando los seres humanos descubrieron cómo manipular la electricidad empezaron a utilizarla en toda clase de formas ridículas y extrañas (más o menos lo que nuestra generación está haciendo con el Internet).

Desde electrocutar personas para que ver qué pasaba hasta usar descargas para “controlar” animales; no había limites. Pero quizá lo más común era la creencia de que esta nueva tecnología podría ser utilizada para curar enfermedades.

Se vendían aparatos que decían curar la calvicie y los problemas renales con electricidad, pero la práctica más curiosa (e ilógica) era la idea de que la electricidad podía ayudar a los hombres en la cama. Se crearon todo tipo de aparatos como camas eléctricas o cinturones que pasaban corriente al pene aparentemente tratando de obtener los mismos resultados que el Dr. Frankenstein..

2. Leche materna es sangre

Esta viene del filósofo griego Aristóteles (volverás a escuchar su nombre en esta lista), que afirmaba que la leche materna era sangre que permanecía almacenada en el cuerpo de mujeres y pasaba por un proceso que la blanqueaba.

No suena muy convincente, ¿verdad? No importa. Esta creencia se mantuvo hasta la Edad Media.

3. Enemas de humo de tabaco

Antes de la medicina moderna existieron toda clase de tratamientos y curas caseras que no parecen muy efectivas en la actualidad.

Ya hablamos de las descargas eléctricas, pero, ¿sabías que la gente utilizaba enemas de humo de tabaco para tratar enfermedades? El humo supuestamente ayudaba a aliviar dolores de cabeza y otras dolencias, pero, como podrás adivinar, no había muchas pruebas científicas que respalden esta práctica.

4. Hadas que se roban bebés

En la Inglaterra medieval las supersticiones llegaban a niveles extremos. Había ideas de vampiros y demonios que poseían a los vivos, pero todas estas son más o menos comunes. La verdaderamente particular es la creencia de los ‘cambios’. Un grupo de personas creía que las ‘hadas’ robaban a sus bebés y los sustituían con copias idénticas. Había todo y pruebas para verificar si el niño había sido cambiado.

5. Los trenes volvían a la gente loca

No hay nada más humano que pensar que las nuevas invenciones tecnológicas van a hacer que el mundo se derrumbe. Todavía hay quienes creen que los celulares causan cáncer o que la televisión te dejará ciego. En el pasado, la gente creía que los vehículos a motor te volverían loco.

Es cierto, en el siglo XIX se popularizó la idea de que las altas velocidades y el constante movimiento de los trenes ‘dañaba’ el cerebro de sus pasajeros.

6. Lobotomías

Esta es un poco más conocida, pero debe ser mencionada para recordar lo que la fakta de acceso a la información comprobada puede hacer.

Este procedimiento, que consistía en insertar un instrumento de metal en el cerebro de personas (frecuentemente a través de los ojos) y moverlo con la esperanza de curar enfermedades mentales, era sumamente popular en el siglo XX. Su inventor, el Dr. Walter Freeman, recibió el premio Nobel por esto en 1949. Unas 70 mil personas recibieron el tratamiento, muchas quedando con daño cerebral permanente.

7. Beber sangre para curar la epilepsia

En la Antigua Roma se pensaba que beber la sangre de gladiadores muertos podía curar la epilepsia. Cuando se prohibió la lucha de gladiadores en el año 400 DC, las personas empezaron a beber sangre de sujetos decapitados.

La creencia probablemente viene de costumbres funerarias antiguas, pero nada le quita lo ilógica.

8. Espermatozoides que contenían personas

Otra teoría de Aristóteles. El filósofo creía que los espermatozoides contenían pequeñas personas dentro de ellos y que las mujeres no contribuían a la creación del nuevo ser, sino que funcionaban algo así como un horno para que crezca la futura persona. Una idea graciosa y sexista al mismo tiempo.

9. ¿La isla de California?

Mientras se exploraba el continente americano en el siglo XVI, algunos cartógrafos llegaron a la conclusión de que California no era parte del Norteamérica sino una isla.

El error eventualmente fue corregido pero mapas con California como una enorme isla se mantuvieron hasta el siglo XIX.

10. Poderes curadores del mercurio

Si no lo sabes, el mercurio es horriblemente tóxico. Entre las posibles pesadillas que te puede traer este metal están las alucinaciones, espasmos musculares violentos y tendencias suicidas.

Pero eso no impidió que la gente lo use para tratar todo tipo de enfermedades en el pasado. Por ejemplo, se creía que aplicarlo al cuerpo humano podía curar enfermedades de transmisión sexual. Y funcionaba en el sentido de que una persona que contraía sífilis y se trataba con mercurio probablemente no podría seguir esparciendo la enfermedad debido a su inoportuna muerte.