Kevin Vera Villavicencio, de 22 años, ya no correrá ni preparará motos para competencias, pues en el sector Santa Rosa, centro de Quevedo, lo velan desde la mañana del 2 de agosto. 

El joven, conocido entre su ‘gallada’ como Prende, había sido asesinado la tarde del lunes, 1 de agosto, luego de que le ‘pegaran’ aproximadamente cinco disparos.

Según testigos, la víctima estaba en el portal de su casa y cuando vio que unos tipos se bajaron de un auto, decidió correr hacia la vía principal, en lugar de esconderse dentro de su vivienda. Esto para que los pistoleros no hirieran a sus familiares que estaban en el inmueble, sobre todo a su abuelita.

Moradores indicaron a la policía que un vehículo de color blanco llegó donde estaba Vera, luego se bajaron dos sujetos y empezaron a disparar. El veinteañero salió corriendo, pero fue perseguido y luego rematado en el suelo.

El jefe de la Policía, Darwin Guevara, indicó que el baleado tenía antecedentes delictivos, por lo que manejan la hipótesis de que sería una muerte selectiva y no un caso de delincuencia común.

Con este asesinato se marcan 97 muertes violentas en el Distrito Quevedo por lo que las cifras rebasarían los límites del año anterior.