Marina (nombre ficticio) no pudo callar más. La adolescente de 15 años se armó de valor y acudió hasta una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) para contarle a una agente que su profesor de natación la manoseaba.

Una fuente policial reveló a EXTRA que el presunto delito sexual habría ocurrido hace dos semanas en un complejo deportivo ubicado en el sur de Guayaquil.

"La joven, de manera voluntaria manifestó que su maestro de natación,  hace 15 días le habría tocado sus partes íntimas, por lo que al no tratarse de un delito flagranre nos trasladamos con la adolescente hasta su domicilio", manifestó la Policía a este Diario.

La institución del orden informó a la progenitora de Marina lo que estaba ocurriendo y le indicó que debía acercarse a la Fiscalía para que presente la respectiva denuncia contra el supuesto agresor.

El fiscal Wilson Álvarez explicó que el delito de abuso sexual esta tipicicado en el artículo 170 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y que este indica que la persona que, en contra de la voluntad de otra, ejecute sobre ella o la obligue a ejecutar sobre si misma u optra persona, un acto de naturaleza sexual, sin que exista penetración o acceso carnal, será sancionada con pena privativa de libertad de tres a cinco años de prisión.