El Gobierno de Estados Unidos y la Cancillería de Ecuador han emitido alertas dirigidas a sus ciudadanos, recomendando evitar cualquier viaje a Venezuela. Las advertencias se basan en el deterioro de las condiciones de seguridad y en la imposibilidad de ofrecer asistencia consular efectiva en ese país.

Las autoridades de ambos países señalaron que la situación actual en Venezuela representa un peligro significativo para los visitantes, en especial por el riesgo de detenciones arbitrarias, condiciones de reclusión inadecuadas y la falta de cumplimiento de garantías procesales.

EE. UU. eleva al nivel máximo su alerta de viaje 

El Departamento de Estado de Estados Unidos asignó a Venezuela el nivel 4 en su escala de advertencias de viaje, la categoría más alta, que recomienda no viajar bajo ninguna circunstancia. La decisión se basa en múltiples factores, incluyendo detenciones indebidas, denuncias de tortura, actos de terrorismo, secuestros, violencia delictiva, disturbios civiles y deficiencias en el sistema de salud.

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En su comunicado oficial, el Departamento de Estado advirtió que actualmente Venezuela es el país con mayor número de ciudadanos estadounidenses detenidos sin el debido proceso. Las detenciones, que en algunos casos se han prolongado por hasta cinco años, han estado acompañadas de condiciones severas, y frecuentemente se han producido sin fundamentos legales sólidos, según el gobierno estadounidense.

La ausencia de representación diplomática directa complica aún más la situación. Estados Unidos no tiene embajada ni consulado en Venezuela, y las autoridades venezolanas no notifican al Gobierno estadounidense cuando detienen a uno de sus ciudadanos. Esto impide cualquier tipo de asistencia consular, incluso en casos de emergencia.

Riesgo para familiares y personas con vínculos con Venezuela

El gobierno estadounidense también alertó que los viajeros con vínculos familiares en Venezuela no están exentos del riesgo. Personas que viajan para visitar a sus parejas o familiares venezolanos han sido detenidas, al igual que los propios parientes acompañantes. Además, contar con doble nacionalidad, visado o historial de viajes previos al país no representa ninguna garantía de seguridad ante posibles detenciones.

Ante este panorama, la recomendación es que, todo ciudadano estadounidense o residente permanente que se encuentre en Venezuela debe abandonar el país lo antes posible, independientemente del tipo de pasaporte que posea.

Ecuador se suma a la recomendación

De manera paralela, la Cancillería ecuatoriana emitió un comunicado en el que recomienda a sus ciudadanos viajar a Venezuela, señalando como principal motivo el riesgo de detenciones arbitrarias y la imposibilidad de garantizar el derecho a la defensa.

El Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana recordó que, en octubre de 2024, el Gobierno venezolano solicitó unilateralmente el retiro del personal consular ecuatoriano. Esta decisión impide que Ecuador pueda brindar asistencia a sus ciudadanos que residen o se trasladan a Venezuela, una situación que se agrava ante la negativa de las autoridades locales a proporcionar información sobre personas detenidas.

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