Mayra Duarte empuñaba en su mano derecha una moneda de 0.25 y otra de 0.5 centavos. El valor justo para cancelar el pasaje que la trasladaría de la terminal terrestre, ubicada en las avenidas Benjamín Rosales y de Las Américas, hasta el centro de Guayaquil. 

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La mujer, de 46 años, llega todas las mañanas al Puerto Principal procedente del cantón El Triunfo. Labora en una empresa de la vía a Daule y mientras esperaba el micro desconocía que la tarde del domingo se emitió un comunicado por parte de la Federación de Transportistas Urbanos del Guayas (Fetug), anunciando el incremento de 10 centavos al costo del pasaje.

“No sabía que había subido y no me parece bien, la situación económica está difícil, deberían pensar más en el pueblo. Ahora debo sumarle 20 centavos más a mis gastos diarios”, lamentó.

Sin embargo, pese a la medida de elevación de la tarifa que debía regir desde la mañana de este lunes 30 de octubre, no todos los conductores lo ejecutaron. José Inga afirmó que pese a que en el parabrisas del bus que conduce hace dos años estaba pegado un sticker indicando el alza a 40 centavos, él prefería evitar problemas con los usuarios, ya que aún la medida no ha sido autorizada por las autoridades reguladoras de tránsito y municipales.

“Solo tengo el sello, pero estoy cobrando los 30 centavos para no tener problemas con los pasajeros, me vayan a romper el parabrisas”, manifestó.

La Alcaldía de Guayaquil informó que en el operativo de control realizado por la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM), en distintos sectores de la ciudad, 22 unidades fueron sancionadas con el sello de suspensión por cobrar “de manera arbitraria” el valor de 0.40 centavos el pasaje. (AEB)

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