Luz María Vásquez, a sus cerca de 70 años, tiene mucha agilidad en sus manos. Toma el barro y como si estuviese acariciando a sus hijos lo agarra suavemente hasta que le da forma. Elabora vasija, pondos y todo lo que su imaginación le permite. Es la única que lo hace en Putuimi, cantón Puyo, provincia de Pastaza. A los 15 años empezó y lo aprendió de su mamá.

Mientras que Angélica Gómez, de 36 años, descubrió el arte que pueden crear sus manos. Ante la necesidad de aportar al hogar aprendió a pintar y lo hace en vasos pequeños de vidrio.

Un hermano se instruyó en Ibarra y le enseñó. Aseguró que al principio fue duro, pero con el tiempo adquirió la práctica. Son tres años que lleva diseñando y pintando en vasos de vidrios y se inspira en la naturaleza. Al día se puede hacer hasta 50 diseños.

Ellas son parte de las 40 personas que integran la Asociación ‘Kuri Warmi’, de Putuimi. Kuri Warmi en castellano quiere decir las ‘Mujeres de Oro’, pero solo el nombre lleva de mujeres, pues la asociación también la integran hombres.

Nancy Mayancha es una de las líderes y mencionó que la finalidad de asociarse es para mostrar y descubrir toda la creatividad de hombres y mujeres del pueblo.

Putuimi pertenece a la parroquia Tarqui y se halla a unos 15 minutos de Puyo. El bus no llega a toda hora hasta la comunidad, los dirigentes están en las gestiones, aseguró Nancy.

Mencionó que las primeras en organizarse fueron mujeres con el objetivo de aportar de manera económica para el hogar.

En la sede diseñan

La asociación tiene una sede que está elaborada con caña y paja toquilla. La cabaña está al ingreso del pueblo, a un costado de la cancha de usos múltiples. Ahí se reúnen, en especial en las tardes, los integrantes para diseñar collares, aretes, pulseras, bolsos y un sinnúmero de artesanías.

La mayoría de las mujeres elaboran artesanías en muyos que son unas especies de cristales que las consiguen en Puyo. No utilizan semillas, pero esperan hacerlo muy pronto y para eso fomentan que en los huertos se siembren plantas con las semillas ancestrales de la selva, aseguró Nancy Mayancha. Gloria Santi es vocal de la comunidad y es parte de la asociación. Asimismo se da tiempo para crear con sus manos los más vistosos accesorios con los muyos. Resaltó que también se elaboran los tambores y artesanías en balsas.

La comunidad tiene 45 años de creada y hace menos de un año se organizaron para impulsar su arte con las artesanías y también el turismo, mencionó Santi.

Arman sus ferias para ofertar su trabajo

En Putuimi demuestran que el trabajo en equipo da sus frutos. Yomira Villafuerte, vocal de la Junta Parroquial de Tarqui, resaltó la laboriosidad de la asociación e indicó que desde la parroquia están ayudando a impulsar y dar a conocer aún más la feria.

Los niños también son parte y a ellos los preparan con la danza para que reciban a los turistas con los movimientos ancestrales. Mirian Mayancha agregó que como pueblo ancestral kichwa abren el camino para las nuevas generaciones y se dé a conocer toda la creatividad que generan hombres y mujeres de Putuimi.

Las artesanías las ofertan desde un 1 hasta 30 dólares que son los accesorios completos con collar, aretes y pulseras. También elaboran los trajes típicos. En esta comunidad dan fe que la unión hace la fuerza. En los días de feria lucen sus trajes tradicionales y se pintan el rostro como agradecimiento a la Pachamama.