Un violento episodio registrado la tarde del viernes 16 de mayo en la Universidad Estatal Península de Santa Elena (UPSE) dejó consternada a la comunidad académica y a los habitantes de la provincia. Un ataque armado a las afueras del campus universitario terminó con la vida de dos personas y dejó a una estudiante gravemente herida.

El hecho ocurrió en momentos en que estudiantes, docentes y personal administrativo abandonaban las aulas. La presencia de hombres armados en motocicleta desató el caos en el recinto, provocando escenas de pánico y desesperación.

El ataque ocurrió a las afueras del campus universitario

De acuerdo con versiones de testigos presenciales, dos sujetos que se movilizaban en motocicleta intentaron ingresar al campus por la garita principal. Al ser impedido el acceso por el personal de seguridad, se dirigieron a la zona de salida y dispararon desde el exterior contra un joven que corría hacia el interior del recinto académico.

El joven intentó refugiarse al percatarse del ataque, pero fue alcanzado por una bala en el pecho y cayó cerca de un muro dentro del campus. Pese a los intentos por socorrerlo, perdió la vida en el lugar.

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Durante el tiroteo, dos estudiantes que salían de clases quedaron atrapadas en medio del fuego cruzado. Una de ellas murió en el sitio, mientras que la otra fue trasladada de emergencia al Hospital Liborio Panchana, donde permanece en estado reservado.

Las víctimas eran estudiantes de Educación Básica

Mediante un comunicado, la Universidad Estatal de la Península confirmó que ambas jóvenes cursaban la carrera de Educación Básica. Algunos compañeros indicaron que pertenecían al cuarto semestre y que, antes del ataque, participaban en los ensayos de una presentación cultural.

La noticia provocó la llegada masiva de padres de familia, quienes buscaban información sobre sus hijos en medio de escenas de llanto y angustia. La institución académica activó protocolos de atención y colaboró con los agentes policiales que acudieron al lugar para iniciar las investigaciones.

Como medida preventiva, y en señal de respeto por las víctimas, la universidad decidió suspender todas las actividades académicas hasta nuevo aviso.

Comunidad exige respuestas y mayor seguridad

La universidad expresó su pesar y exigió el esclarecimiento del hecho. “Como institución, estamos profundamente consternados por este hecho ocurrido en los exteriores de la universidad. Brindaremos acompañamiento a los familiares de las víctimas y, al mismo tiempo, exigimos con firmeza a las autoridades competentes que este caso no quede en la impunidad”, señaló en su comunicado.

El silencio de las autoridades gubernamentales ha generado indignación en la ciudadanía. Ni las alcaldías locales, ni la Gobernación ni la Policía se han pronunciado oficialmente sobre el hecho. Ante esta ausencia de respuestas, distintos sectores exigen acciones urgentes frente a la creciente inseguridad que afecta incluso a espacios educativos.

Jazmine Ricaurte, residente de Salinas, lamentó la falta de coordinación entre las autoridades: “No solo el alcalde de La Libertad debería decir algo. Lo debe hacer la alcaldesa de Santa Elena, el alcalde de Salinas. En un territorio tan pequeño, todos deberían trabajar de la mano para exigir seguridad. Es increíble, totalmente descabellado que dentro o a puertas de la universidad maten a dos personas. En este centro universitario estudian personas de todos los cantones. ¿Por qué son tan indiferentes a lo que pasa?”

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