Liliana Anay Córdova Bonoso, de 28 años, y Jonathan Israel Gómez Zúñiga, de 19, fueron encontrados sin vida la tarde del sábado 10 de mayo en los alrededores del denominado Canal de la Muerte, ubicado en el sector de Monte Sinaí, en el noroeste de Guayaquil. Ambos mantenían una relación sentimental y habían sido reportados como desaparecidos desde el pasado 29 de abril.

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Los cuerpos, en avanzado estado de descomposición y con signos de haber sido tortuados, fueron localizados tras varias labores de búsqueda realizadas por la Unidad de Desaparecidos de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida (Dinased).

Por este doble crimen fue detenido Darwin Ramón Vera Quiroz, alias Chueco, quien registra antecedentes penales por delitos como robo, estafa, ocultación de bienes, tráfico de drogas, porte ilegal de armas y pertenencia a una organización delictiva.

Una fuente cercana a la investigación reveló que mediante técnicas especiales de investigación y el uso de información proporcionada por fuentes humanas, se logró ubicar el paradero de los presuntos responsables de la desaparición y asesinato de la pareja. Se conoció que los jóvenes vivían desde hace pocos meses en Monte Sinaí y que, por tener tatuajes, fueron identificados por una banda delictiva que los vinculó erróneamente con un grupo rival.

Supuestamente, los sacaron de su vivienda, la cual fue saqueada, y posteriormente los asesinaron. "Los cuerpos fueron encontrados junto al llamado Canal de la Muerte, en estado de descomposición, dentro de sacos y cubiertos con cal", explicó el informante.

Los responsables pertenecerían a una organización conocida como Los Águilas, liderada por alias Niño, Maestro y Chueco, dedicada a actividades como extorsión, microtráfico de drogas y cobro de 'vacunas' en el sector.

"El viernes 9 de mayo se ejecutó un operativo en la cooperativa Voluntad de Dios, donde fue aprehendido alias Chueco. Durante la intervención se incautó un arma de fuego tipo revólver calibre 38 y una libreta con anotaciones relacionadas con cobros extorsivos y posibles víctimas en la zona de Monte Sinaí", explicó la fuente.

En el domicilio de otro sospechoso, alias Montuvio, quien aún no ha sido capturado, se hallaron imágenes alusivas a la Santa Muerte, símbolo que algunas bandas criminales usan como ícono espiritual o de protección.

Las autoridades continúan con las investigaciones para dar con el resto de implicados en este caso que ha conmocionado a la comunidad.

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