Diez de los procesados por el caso de la explosión del radar en Montecristi, fueron llamados a juicio, este viernes 1 de marzo, por un juez de la provincia de Manabí.

Se trata de elementos de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, quienes fueron procesados por su presunta participación en grado de omisión en el delito de sabotaje, según informó la Fiscalía.

Uno de los informes periciales de la explosión derivó que en el sitio se hallaron residuos de explosivos plásticos, los cuales son de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.

Los militares podrían enfrentar una pena de 10 años por el delito de sabotaje, tipificado en el artículo 345 del Código Integral Penal.

Según las investigaciones, los sospechosos integraron el equipo de las Fuerzas Armadas asignado a la seguridad y patrullaje del cerro Montecristi, el día en que fue destruido ese dispositivo. Este podía cubrir un rango de 220 millas a la redonda y se encontraba instalado en la cima del cerro Montecristi, a 600 metros de altitud sobre el nivel del mar.

Su instalación se dio la madrugada del 27 de octubre de 2021 con el objetivo de detectar tráficos aéreos no identificados, sobre todo narcoavionetas que aterrizan en pistas clandestinas de la zona rural manabita.

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