El velorio de Jéssica Maribel Acero Cholango y su sobrina recién nacida se llevó a cabo en la misma casa donde perdieron la vida. Ambas fallecieron por inhalar monóxido de carbono emitido por una máquina generadora de electricidad en Santa Rosa de Pingulmí, perteneciente a la parroquia Cangahua, en el cantón Cayambe. La tragedia tuvo origen en los frecuentes cortes de luz, lo que llevó a la familia de las víctimas a alquilar dicho generador.

María Pilataxi, tía de las fallecidas, relató que alquilaron el generador para Jéssica Maribel, de 27 años, quien ocho años atrás fue diagnosticada con una enfermedad catastrófica llamada de Pompe, que le causaba dolor en las articulaciones, flacidez muscular y dificultad respiratoria, por lo que necesitaba utilizar oxígeno.

“Todas las noches debía usarlo, y el aparato tenía que estar conectado a la luz”, explicó María, quien estaba afuera de la casa donde se velaba a sus dos parientes. La tragedia ocurrió durante la madrugada del miércoles 24 de abril.

La falta de energía eléctrica llevó a que la familia utilizara un generador de gasolina para mantener funcionando el tanque de oxígeno de Jéssica Maribel. Al estar en funcionamiento durante toda la noche, la combustión del generador produjo monóxido de carbono, el cual se dispersó por toda la vivienda, resultando en la tragedia.

En la casa vivían no solo Jéssica Maribel, sino también su hermana Patricia Cholango, madre de la bebé fallecida y otra niña. Las cuatro resultaron afectadas por la inhalación del monóxido, y nadie se dio cuenta de la tragedia hasta que Mónica Acero, otra hermana de Jéssica y Patricia, llegó a la casa. “Alrededor de las ocho de la mañana, llegué y golpeé la puerta, pero nadie respondía”, relató Mónica.

Después de insistir, Patricia salió prácticamente moribunda pidiendo ayuda. La situación era grave, ya que el monóxido la había debilitado tanto que estaba a punto de perder el conocimiento, al igual que su hija Samay. Mónica pidió ayuda a un vecino para que atendiera a Patricia mientras ella buscaba a Jéssica Maribel y la otra niña.

Lea también: El estado de salud del bebé que nació dentro de un taxi en Guayaquil

Dentro de la casa, Mónica encontró un escenario desgarrador: su hermana y la bebé estaban sin vida sobre una cama. La familia llamó rápidamente a los equipos de socorro y llegaron los bomberos de Cayambe, quienes atendieron a Patricia y a Samay y las trasladaron a un hospital. Sin embargo, solo se confirmó la tragedia con respecto a Jéssica Maribel y la bebé.

La familia ahora enfrenta la dificultad de no tener recursos para sepultar a las víctimas, aunque han recibido algo de ayuda. “La situación de la familia me conmovió, así que donamos los ataúdes para ayudar en algo”, dijo Aracely Alcívar, de la funeraria Nueva Jerusalén, quien costeó los gastos del velorio.

Aunque los familiares de las fallecidas no han mencionado acciones legales, la abogada Valeria Mena sugirió que podrían demandar al Estado. “Esta muerte ocurrió porque no se les garantizó un adecuado nivel de vida y un servicio básico como es el suministro eléctrico”, señaló la jurista.

Según Mena, al no resolver los apagones por parte del Estado, se dejó en una situación de vulnerabilidad a personas como Jéssica Maribel, quien dependía de la electricidad para su tratamiento médico.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!