Las extorsiones se extienden como plaga en Guayaquil. Las víctimas de los ‘vacunadores’ ya no solo son los dueños de comercios ubicados en el noroeste o en el sur de la ciudad, sino también los situados en establecimientos comerciales del centro.

Esta vez el afectado fue el propietario de un restaurante ubicado en Puerto Santa Ana, a quien a cambio de no atentar en contra de su vida le exigían 50 mil dólares.

Un oficial de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) de la Policía reveló que las extorsiones en contra del dueño del local comenzaron hace dos semanas y que primero le exigieron 3.000 dólares, dinero que la víctima canceló por temor a que atenten en contra de su vida o de su local.

“Estos delincuentes estudian a la víctima y dependiendo el lugar o la persona es el monto que le exigen. El perjudicado hace 15 días pagó 3.000 dólares. Ahora le subieron la cuota a 50 mil. Primero lo llamaron por teléfono, luego por WhatsApp le enviaron fotografías de su establecimiento, finalmente fueron al negocio, le dijeron que si no pagaba el dinero que le exigían, lo iban a secuestrar. Se hacían pasar como miembros de una mafia”, contó el oficial.

Por el monto elevado que le estaban exigiendo, el dueño del restaurante decidió denunciar la extorsión y esto le permitió a la Policía detener al presunto responsable de este delito.

‘Fichita’ en colombia

El detenido, José David Montoya Gil, de nacionalidad colombiana, registra antecedentes penales por droga en su país, según información policial. Su captura se registró la tarde del jueves 2 de febrero en el noroeste porteño, en su poder se encontró el teléfono con el que contactaba a la víctima y dinero en efectivo.

El oficial recomendó a las personas que están siendo víctimas de ‘vacunadores’ acercarse a la Fiscalía y denunciar el delito. “Una vez que pagan, se convierten en un cajero automático de los extorsionadores. Una medida de prevención es no pagar”, sostuvo. (AEB)