Los dos primeros meses de funcionamiento del Metro de Quito, la Policía que controla a este medio de transporte subterráneo no tenía muchas complicaciones con los ciudadanos que cometían infracciones dentro de los trenes y andenes.

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Sin embargo, según las autoridades, finales de febrero los quiteños malcriaditos han roto varias normas del reglamento de buen uso del Metro de Quito.

La funcionaria que trabaja en el área de taquilla de la estación de Iñaquito, en el norte de la capital, alertó a los policías de que un joven estaba con actitud prepotente y no hacía caso a las indicaciones que ella le estaba dando.

Según la alertante, ella le había pedido que se acercara a la otra caja para obtener su boleto porque en el que ella trabaja se iba a cerrar porque cumplimiento de horario de los servidores de la taquilla. En ese momento, el usuario, sin razón alguna empieza a agredir verbalmente a la funcionaria con palabras soeces.

“Ch… de tu madre, trabaja pues hija de …” le gritaba. Además, el ciudadano la desafiaba diciendo “llama y múltame rápido”. En ese momento llegaron policías quienes calmaron los animos y retuvieron al sujeto hasta que llegaran los agentes de control metropolitano.

Ellos le emitieron una sanción por agredir verbalmente al personal interno del Metro de Quito. Esto se castiga con el pago de un Salario Básico Unificado, es decir 460 dólares. Una señora que acompañaba al infractor, quien al parecer era la madre, se avergonzó por el accionar de su pariente.

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