La escena parecía sacada de una película de terror, de las más espeluznantes. La mañana de ayer, el cuerpo desmembrado de Jefferson Miguel Morán Cedeño, de 39 años, apareció esparcido sobre la calzada.

El hallazgo lo realizó un transeúnte a las 06:30. El cadáver estaba sobre el kilómetro 1 del baipás que une la vía Durán-Boliche con la vía Durán-Yaguachi.

Presuntamente la víctima no habría fallecido producto de un arrollamiento. Su muerte habría ocurrido antes, según el testimonio de José Herrera, agente de Criminalística de la Oficina de Investigación de Accidentes de Tránsito (OIAT).

El cuerpo de Jefferson estaba desmembrado y esparcido a 100 metros a la redonda. Posiblemente varios vehículos le pasaron por encima, por lo que tuvieron que utilizar una pala para recogerlo.

Morán residía en Pascuales y la noche anterior a su muerte estuvo bebiendo con un primo en un bar de esta parroquia. Su familiar apareció la mañana de ayer escopolaminado y desnudo en la ciudadela Primavera 2 de Durán.

La policía lo auxilió y lo comunicó con sus familiares. En ese momento, los allegados presumieron que la víctima, que apareció en un sector despoblado de este cantón, se trataba de Jefferson, a quien de cariño lo llamaban La Luz de Pascuales.

Ambos estaban desaparecidos desde la noche del miércoles.

El fiscal Roberto López Franco informó que los deudos corroboraron que se trataba de su ser querido, luego de acudir al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses.

“Lo reconocieron por la vestimenta y unas llaves que cargaba, que eran las de su casa. Los zapatos y las huellas dactilares lo confirmaron”, expresó Franco.

Habría sido ubicado allí

El funcionario del Ministerio Público explicó que la escena del hecho no estaba ensangrentada. Es decir, el accidente no fue la causa de la muerte, por lo que se presume que fue ubicado allí.

“Habría que investigar qué hacía allí. Seguramente fue abandonado en ese sector oscuro, apartado y en medio de una carretera”, indicó Franco.

El funcionario dijo que el primo de Morán aún se encuentra inconsciente, por lo que no ha podido ser interrogado.

Limpieza de la calzada

Finalmente, luego de más de una hora de trabajo minucioso y de recabar evidencias que permitan esclarecer este hecho, los uniformados de la Comisión de Tránsito del Ecuador colocaron las partes disgregadas de la víctima en una bandeja metálica, sobre la cual estaba un plástico negro.

Luego de que los restos fueron embarcados en el vehículo de Medicina Legal de la Comisión de Tránsito y este se retiró del lugar, el trabajo de los socorristas del Cuerpo de Bomberos recién comenzaba. Ellos limpiaron la calzada cubierta por las huellas que dejó este estremecedor hecho que tiñó de sangre una vía del Guayas.

Llamada

El agente de la OIAT indicó que fueron informados por el ECU-911. Un transeúnte fue quien dio el aviso.