Varios vehículos livianos quedaron atrapados entre gran cantidad de piedras y lodo, en la vía E35, a la altura del puente de Guayllabamba, norte de Quito, donde se produjo un deslave por la fuerte lluvia que cayó en la zona.

El subteniente Brayan Toapanta del Cuerpo de Bomberos informó que las unidades de emergencia se desplazaron al lugar, donde prestaron auxilio a los ocupantes de tres automóviles que quedaron atrapados por el agua, lodo y piedras.

Miembros de la Policía Nacional cerraron la circulación de todo tipo de automotores que se dirigían hacia la capital, para evitar más inconvenientes.

Los conductores tuvieron que tomar la vía al Quinche para llegar a sus destinos porque la carretera permanecerá cerrada unas horas, hasta que los trabajos de limpieza culminen completamente.

En la vía trabaja maquinaria y varios obreros permanecen removiendo el lodo y la gran cantidad de piedras que obstaculizaban la Panamericana Norte.

Topanta hizo un llamado para que los choferes manejen con responsabilidad, sin exceder la velocidad, por el fuerte temporal invernal.

Mientras tanto, gran cantidad de vehículos, especialmente interprovinciales e interparroquiales se desplazaban por la vía al Quinche.