Marlene dormía y el allanamiento a su vivienda ubicada en Mapasingue Oeste de Guayaquil por parte de elementos del GOE y Antinarcóticos la despertó. Ella fue identificada como la líder de una organización narcodelicitiva.

Esta intervención policial tenía previsto el allanamiento de diecisiete viviendas y la detención de catorce integrantes de una banda que comercializaba droga. Se presume que las sustancias eran transportadas hasta Guayaquil por vía terrestre desde la frontera con Perú.

Mientras se daban los allanamientos simultáneos, las velas puestas a sus santos por parte de Marlene se consumían lentamente en algunos rincones de su vivienda. En los distritos Portete, Nueve de Octubre y la Florida esta mujer ordenaba el movimiento de la sustancia ilícita. Según el fiscal Jean Carlos Almeida este trabajo investigativo se llevó desde hace cuatro meses y luego de haber confirmado toda la operación con sus integrantes se emitió órdenes de detención y de allanamientos.

En los inmuebles se encontraron evidencias como armas, droga y un sistema para el pesaje y empaquetado de las dosis. También se dio con el centro de acopio que estaba ubicado en el interior de una vivienda de la ciudadela Guayacanes.

Como cosa curiosa se pudo apreciar en la casa de Marlene que dentro de una tina de plástico había una foto de una mujer, entre cuchillos, calabazas más cabezas de muñecos viejos y velas derretidas. Los detenidos fueron puestos a órdenes de la Fiscalía para ser juzgados en las próximas horas por el tráfico y comercialización de drogas.