En Esmeraldas, decenas de familias pasarán la Navidad alojadas en un albergue. Se trata de las afectadas por el sismo de 5.8 grados que el pasado 19 de noviembre golpeó -sobre todo- a las poblaciones de Tonsupa y Atacames.

Las autoridades activaron un campamento en la cancha Paz y Progreso, sector Pueblo Nuevo, en Tonsupa (Atacames). En el albergue, este 21 de diciembre se alojan 470 personas (115 familias) distribuidas en 79 carpas. Una de ellas es Rosa Bustos.

Diario EXPRESO recogió el testimonio de la esmeraldeña agobiada por la tristeza que le provocó perder su vivienda, al mismo tiempo que sus hijos se quedaron sin empleo. Es decir, ellos esperaban la llegada de turistas a propósito del feriado del 24 al 26 de diciembre para trabajar en algún hotel. “Ahora no tenemos nada. Solo debemos tener fortaleza para seguir”, dijo la mujer de 56 años.

La casa de Bustos, levantada en el barrio El Progreso, en Tonsupa, quedó completamente afectada tras el sismo. Ella es una de las refugiadas en una de las carpas donadas por la Acnur con capacidad para 10 personas. Allí prevé quedarse varios días.

Los militares vigilan las decenas de carpas azules y blancas del albergue. Decenas de niños permanecen allí junto a sus padres. Corren, juegan y comparten las actividades lúdicas que el personal de la Secretaría de Riesgos implementa. Según las cifras oficiales, son 700 familias las que solicitaron se evalúe el estado de sus inmuebles.

De acuerdo a las autoridades, su objetivo es completar la revisión de entre el 40 y 50 % de los inmuebles hasta este 21 de diciembre. Las familias que no corran riesgos podrán volver a sus hogares. Esa autorización depende de la evaluación que hacen los técnicos de la Secretaría, de la Universidad de Manabí y del Ministerio de Inclusión Económica y Social.

A dos días del temblor, el Gobierno y el Municipio de Atacames (Esmeraldas) iniciaron las demoliciones de los inmuebles colapsados o gravemente afectados. Este jueves, en Tonsupa, sigue la demolición, pues 145 estructuras fueron destruidas por los sismos.

La provincia está en alerta desde la madrugada del lunes. Desde entonces, siete sismos de magnitudes entre 3,6 y 5 grados en la escala de Richter se registraron hasta las 18:00 del martes. A través de Twitter, Rafael Correa, instó a la población a “inundar las playas de Esmeraldas en los feriados de Navidad y Año Nuevo” para ayudar a reactivarla.