La mañana de este viernes 12 de mayo de 2023, en el Cementerio General de Esmeraldas, sepultaron los restos de Jeico y Jhon Reyes Viveros, cuyos cuerpos fueron desmembrados de forma sanguinaria en una zona montañosa cercana al barrio Voluntad de Dios, en la vía a Atacames y sus familiares descartan que ellos hayan estado involucrado con grupos delictivos.

Según indicaron los allegados después que la tarde del jueves 11 de mayo retiraran sus restos, tanto Jeico como Jhon eran dos deportistas que les gustaba jugar fútbol en la playa de Las Palmas.

“No sabemos por qué se los llevaron y terminaron matándolos de esa forma. Tenían cortes por todos lados”, contó un allegado de las dos víctimas.

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La Policía maneja la hipótesis de que el doble crimen de los hermanos es resultado de una disputa entre bandas delictivas.

Para el experto en seguridad Mario Pazmiño, aquella forma sanguinaria de cometer desmembramientos es para tratar de intimidar a la banda contraria y a los moradores.

“Con hechos como los que estamos viendo en Esmeraldas, las bandas criminales que operan en esa zona del país están mandando un mensaje de terror y miedo a otras organizaciones delictivas... Además es una advertencia de que a cualquier persona u organización que intente ingresar en esa zona le pasará lo mismo”, explica el experto.

A los esmeraldeños les alarma la saña con la que están actuando últimamente los grupos criminales.

Después del cruel asesinato de los hermanos Reyes Viveros, en el centro de Esmeraldas, en las calles Pedro Vicente Maldonado y Pichincha, en el ingreso al sector Las Malvinas, asesinaron a otro ciudadano quien fue baleado y luego le desfiguraron el rostro a punta de pedradas. La víctima no ha sido identificada.

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