Los hechos delictivos ocurridos esta semana en Guayaquil, principalmente en los últimos dos días, causan alarma y preocupación en la ciudadanía. El malestar ante la inseguridad que azota la ciudad ha sido tan evidente, al punto de que la Policía Nacional anunció que desde hoy 500 uniformados más se sumaron al control delincuencial en la urbe.

Ante tal escenario resulta primordial tomar en cuenta una serie de recomendaciones para evitar pasar un mal rato y ser víctima del hampa. El experto en seguridad y prevención de delitos, John Garaycoa, refiere que uno de los tips importantes en este ámbito es cambiar la ruta comúnmente utilizada para llegar al trabajo, universidad o demás sitios a los que se necesita ir cotidianamente.

Precisamente ayer, jueves 26 de noviembre de 2020, un guardia de seguridad, identificado como Ernesto Saavedra Plúas, fue baleado mientras salía de su ‘camello’ en una motocicleta, por la avenida 25 de Julio. Sus atacantes se movilizaban en una camioneta.

No andar solo, menos en las noches

Garaycoa también sugiere que, en la medida de lo posible, no se acuda por las noches a gasolineras, centros comerciales, farmacias u otros lugares. También puntualiza que es mejor ir al supermercado acompañado y observar a los alrededores alguna situación extraña al momento de abandonar el establecimiento.

¡‘Pilas’ con lo que das a conocer!

Otro punto a considerar, según el especialista, es no revelar información sensible en redes sociales, como por ejemplo el sitio en el que uno se encuentra. Es, además, preferible limitar el uso de prendas de vestir con el nombre o logotipo de la empresa donde se labora o de un emprendimiento propio.

Salir de las zonas de escape

Finalmente, Garaycoa añade que una persona es vulnerable a los ‘pillos’ en un rango de tres cuadras cercanas a su vivienda o su empleo. “Si te quieren secuestrar, ya te estudiaron dos meses y ya tienen las rutas de escape a tres cuadras de tu casa o trabajo. Así que si te tratan de agarrar o parar, ¡no te detengas! Si sales de esas tres cuadras ya no tienen rutas de escape y te dejan ir”, explica.