La mañana de este lunes 22 de junio, a través de Twitter, Carlos Sánchez abogado del prefecto del Guayas, Carlos Luis Morales, confirmó su fallecimiento por un infarto. 

Tras su deceso, la Fiscalía General del Ecuador informó que empezaría una investigación sobre este acontecimiento. Así mismo, aseguró que la Policía Judicial ya tomó versiones de los familiares.  

Sánchez confirmó a este medio que el estado de salud de Morales estuvo grave, por lo que fue trasladado a la clínica Kennedy, en Samborondón, donde a los pocos minutos murió de un infarto. Añadió que el prefecto sufría de una patología respiratoria desde hace unos años que lo obligaba a usar oxígeno. 

Según declaraciones de su hijo mayor, Luis Morales, los paramédicos no pudieron asistirlo a tiempo debido a que el grillete que cargaba debía ser retirado por agentes policiales, lo que complicó el procedimiento de reanimación.  Desde el viernes, 5 de junio, el prefecto del Guayas llevaba el dispositivo mientras se realizaba una investigación en su contra.

"Dijo (el policía encargado) que no podían retirar el grillete sin una autorización judicial", aseguró el hijo mayor de Morales. Además, afirmó que el dispositivo continuaba en el cadáver. La declaración fue complementada con los señalamientos que realizó Sánchez, quien expresó que los policías encargados de la custodia habrían aseverado que no podían quitarle el grillete sin una orden judicial.

Por otra parte, María Alejandra Morales afirmó que su padre sufría de ansiedad y que esto habría quebrantado su salud física. 

Sobre la ubicación de Sandra Arcos, esposa de Morales, quien también es investigada por presunto peculado, el abogado Sánchez aclaró que no habría salido del Ecuador, "obviamente está escondida de esta justicia, porque así no se puede frentear un proceso legal", agregó.

Según las declaraciones de Sánchez, la investigación en contra de Morales se trataba de una persecución que culminó con la vida del periodista.

Morales fue señalado por la Fiscalía por el presunto delito de tráfico de influencias y peculado, tras el sobreprecio en la compra de insumos médicos. Estos contratos de compra habrían sido hechos con empresas a nombre de sus hijastros y esposa. 

El viernes 19 se realizó una sesión extraordinaria del Consejo Provincial del Guayas para que se investiguen los contratos realizados por la prefectura. Más de veinte consejeros provinciales firmaron un pedido de destitución lo que dio inicio al proceso. El caso judicial abrió también un frente político que inició el proceso de remoción en su contra.