Ni colocar rejas tiene a salvo a los habitantes de la manzana 114 de la ciudadela Guayacanes, norte de Guayaquil, de la delincuencia.

Dos malandrines aprovecharon que una moradora abría la puerta peatonal del cerramiento, para que ingresen dos familiares que llegaron de visita, para ellos meterse a la fuerza y atracar a los residentes de esta zona porteña.

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Moradores contaron que los pillos llegaron a bordo de un taxi amarillo y que, al parecer, esperaban el momento propicio para cometer su fechoría, ya que apenas observaron que abrían la puerta ingresaron.

"La vecina no pudo correr, como lo hicieron las otras personas, ya que ella tiene una discapacidad en una de sus piernas, la cogieron del cabello y la arrastraron, ella tiró el celular contra el piso para evitar que se le lleven, aún así se lo quitaron", relató el lugareño.

Otra moradora manifestó fueron colocadas hace 8 meses por seguridad, ya que en el sector se ha vuelto muy frecuente ver a delincuentes rondando y esperando la oportunidad para atracar.

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