Por segunda vez en menos de un mes, la unidad educativa Dolores Cacuango, ubicada en la ciudadela Las Orquídeas, en el norte de Guayaquil, es blanco de delincuentes.

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En el más reciente robo, los pillos rompieron las seguridades del plantel para meterse y llevarse bancas metálicas, escritorios y un parlante, manifestó un morador, quien solicitó la reserva de su identidad.

El lugareño explicó que no es la primera vez que ladrones ingresan al establecimiento educativo y que ya en otras ocasiones se han llevado hasta las computadoras y otros utensilios de educación.

"Los maestros también han sido victimas de robos, el sector es desolado y casi no se ve presencia policial, colinda con un bosque y seguramente esto facilita a los pillos para por ahí huir". Entran escalando las paredes o rompen rejas. Ya no hay guardias, ni conserjes", comentó.

El más reciente robo a este establecimiento educativo, que ha sido dos veces visitado por la delincuencia, se registró el jueves 18 de enero, en pleno estado de excepción, decretado por el presidente de la República.

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