La intención de los criminales que llegaron a bordo de motocicletas era ingresar a los predios de un inmueble donde funciona una piscina que da atención al público. Sin embargo, el guardia de este lugar les prohibió el ingreso y esto ocasionó su muerte.

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El hecho de sangre que no solo acabó con la vida del cuidador, Erick Salvador, de 42 años, sino también la de su amigo y vecino, se registró la noche de este domingo 14 de abril en las calles Domingo Savio y Guerrero Valenzuela, en el sector del Cristo del Consuelo, suroeste de Guayaquil.

Familiares de Erick contaron que él tenía 12 años cuidando la puerta de ingreso de este lugar que es alquilado para eventos y también a las personas que desean disfrutar de las dos piscinas que tiene en su interior.

"La intención de estos delincuentes era ingresar, mi hermano les cerró la puerta y les dijo que no tenía las llaves, esto los enfureció, se desquitaron con él, y le dieron un tiro en la cabeza", manifestó la hermana de uno de los asesinados.

Moradores contaron que el otro fallecido, Jaime Guzhñay, ya herido corrió hasta su domicilio ubicado en la misma cuadra, sin embargo, producto de las heridas de proyectil se desplomó y falleció.

Este reciente hecho de sangre se produce a cinco cuadras de donde el pasado 11 de abril fueron asesinadas cinco personas, entre ellas un menor de edad, en las calles Azuay y Gallegos Lara.

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Un día antes de este doble asesinato en las calles Chambers y Gallegos Lara, se registró otra muerte violenta, la víctima también fue asesinada a tiros.

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