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Guayaquil: así son las mujeres que eran ‘cazadas’ por taxistas secuestradores
Estudiante guayaquileña vivió siete horas de pesadilla tras abordar un vehículo amarrillo en los exteriores de un centro comercial
No seleccionaban a cualquiera. Las víctimas de delincuentes que se hacían pasar como taxistas debían ser mujeres jóvenes.
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La noche de este martes 22 de agosto una estudiante, de 20 años, abordó un taxi en los exteriores de un centro comercial del norte de Guayaquil para regresar a su domicilio, sin imaginar que allí comenzaría su pesadilla.
Minutos después, cerca de la ciudadela Urdesa, el conductor del auto amarillo paró la marcha del carro y en complicidad con otros dos sujetos, quienes estaban armados y se movilizaban en un auto de similares características, la secuestraron y llevaron a un sector apartado de Durán.
Un oficial de la Policía contó que estos malhechores no solo secuestraban a las jóvenes, también las manoseaban y luego se contactaban con sus familiares exigiéndoles elevadas sumas de dinero a cambio de devolverlas con vida.
Los dos carros tipo taxi que habrían participado en el delito, un celular, un arma de fuego con municiones y alimentadora, prendas de vestir y documentos de la víctima.
“Parecía una carrera normal, ya en el carro las amedrentaban, las llevaban a un sector de Durán y allí las mantenían en cautiverio, dentro de una casa o en un carro. En el caso de esta joven se hicieron tres allanamientos. A ella se le llevaron sus pertenencias, le sacaron dinero del cajero, luego llamaron a sus familiares para exigirles 10.000 dólares. Durante el operativo detuvimos a la persona que la custodiaba, este hombre tenía un arma de fuego con la que la amedrentaba”, explico el investigador.
La chica fue encontrada dentro de un carro, el cual estaba estacionado en un parqueado de la primera etapa de la ciudadela El Recreo, del cantón ferroviario.
El oficial aseguró que esta no sería la única víctima de estos sujetos que ‘cazan’ a mujeres en los exteriores de los centros comerciales, ya que al menos otras siete féminas también habrían sido secuestradas y abusadas sexualmente por estos delincuentes.
“En poder del detenido se halló una evidencia que lo relaciona con el delito de secuestro. Es importante que las personas afectadas denuncien y si alguien reconoce a este individuo se acerque a la Policía o la Fiscalía”, afirmó.
Finalmente, tras esta amarga experiencia, a las 03:00 la estudiante fue devuelta a sus familiares. (AEB)
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