¡Viaje ‘bien cargado’!

Al fin se develó el misterio de la cantidad de droga que transportaba el bus de turismo internacional de la muerte, que cobró la vida de 23 personas, de nacionalidad colombiana, venezolana y ecuatoriana.

La unidad de la empresa Cooperativa de Transportes Especiales del Oriente, con 38 pasajeros a bordo, también llevaba en su interior 579.119 gramos de marihuana tipo creepy.

La droga había sido camuflada en cuatro caletas que fueron elaboradas en el piso del automotor para poder evadir los controles policiales, durante el largo recorrido que tenía que realizar en la ruta Colombia - Ecuador - Perú.

El supuesto viaje de turismo gratuito empezó en Cali, pero no logró cumplir su objetivo planificado, que presuntamente era llegar con los usuarios a las playas de la Costa ecuatoriana.

Con los pasajeros y la marihuana dentro, el bus de placas USA-251 se accidentó aparatosamente, la madrugada del martes 14 de agosto, en la vía Pifo-Papallacta, en el sitio conocido como la curva de la muerte, sector de Cochauco-El Carmen, nororiente de Quito.

Tras el percance vial, las indagaciones de la Policía determinaron que el viaje tenía varias inconsistencias. Una de ellas y la principal, era el extraño ingreso por la zona de San Miguel, en la frontera norte de Ecuador.

Llegaron a Lago Agrio, de donde habría partido rumbo a Quito a la medianoche del lunes, de allí se generó el volcamiento aproximadamente a las 02:50 del martes.

Con todos los antecedentes, los uniformados llevaron a cabo un peritaje minucioso a la unidad de placa colombiana, con el fin de esclarecer la procedencia y legalidad del automotor, pasajeros, equipajes y otras circunstancias suscitadas durante el inusual recorrido.

Por ello, la tarde del jueves, las autoridades de la Policía y Fiscalía ecuatoriana fueron alertadas por la Fiscalía de Colombia, que el carro llevaba una considerable cantidad de droga.

Eso hizo que agentes policiales de la Unidad Contra el Tráfico para Consumo Interno (Uctci), con orden de allanamiento, ingresaran al patio de retención vehicular, ubicado en la parroquia Calderón, al norte de la capital, para inspeccionar detenidamente las partes del autobús.

La diligencia judicial duró varias horas, desde la noche del jueves hasta las 4 de la madrugada de ayer. Los uniformados utilizaron taladros, pata de cabra y cizallas para abrir las caletas que se encontraban en el piso de la estructura del automotor.

El general Carlos Alulema, director nacional de Antinarcóticos del país, informó que la sustancia vegetal verdosa encontrada dio positivo para marihuana, tras la prueba preliminar de homologación.

Ahí fueron hallados 548 paquetes rectangulares, que estaban cubiertos con cinta de embalaje y tenían logotipos con los nombres ‘Caballo’ ‘Regalo’ y ‘King’.

“Se realizan las investigaciones para determinar quién es el dueño de la droga y se recaba información que permita esclarecer el hecho, para lo cual se mantiene una comunicación permanente con sus similares de la Policía colombiana”, manifestó el general Alulema.

La fiscal subrogante de Pichincha, Ruth Palacios, manifestó que “el caso está en indagación previa y se realizarán las delegaciones necesarias para identificar a los culpables”. La diligencia durará 30 días.

Con respecto a los heridos, expresó que “se investigará quién tiene participación y se determinará quién puede salir del país y quién no”.

Alulema precisó que la más de media tonelada estaba valorada en 1’737.000 dólares. (HA/ KA)

Cuerpos de colombianos ya fueron retirados

El cadáver de Carmelina Hidrobo fue el primero en ser retirado de la morgue de la Policía, de los ciudadanos extranjeros que fallecieron en el accidente de tránsito en la vía Pifo-Papallacta.

La mujer de 42 años, de nacionalidad colombiana, se embarcó en el bus que realizaba un supuesto tour a las playas de Ecuador, pero que no llegó a disfrutar porque perdió la vida en el camino.

Al anfiteatro, ubicado en la avenida Mariana de Jesús, norte de Quito, llegaron allegados de la occisa, entre ellos Marcy Rodríguez, para retirar los restos mortales de su ser querido, tras realizar los trámites de ley.

“El día de hoy, gracias a la colaboración de la cancillería de Colombia, hemos podido culminar con las diligencias y la llevamos a nuestro país”, manifestó la joven colombiana, quien angustiada y apresurada caminaba de un lado al otro en las dependencias de Medicina Legal.

Un poco de tranquilidad tuvo la muchacha, cuando el féretro con el cuerpo fue embarcado en una pequeña buseta fúnebre que lo llevaría a su país de origen.

La noticia de que iban a tener un avión de Colombia para llevar a los ciudadanos fallecidos no llamó la atención de los parientes de Carmelina, quienes decidieron trasladarla por vía terrestre.

“Queremos llegar lo más pronto posible a nuestro país con mi tía para que reciba cristiana sepultura”, dijo Rodríguez, quien apresurada se alejó del lugar.

A la morgue de la capital también llegaron familiares de otros fallecidos colombianos. La mayoría de los deudos no deseó comentar de lo acontecido.

“Por favor no nos filmen ni tomen fotos”, manifestaron, mientras se reunían con un representante del consulado de Colombia, quien acudió a la morgue.

Una de las pocas que habló fue Luyar Hernández, familiar de Ana Laila Santofimio, de 22 años, otra de las fallecidas en el percance vial.

“Espero que el caso se investigue para saber qué sucedió”, manifestó Luyar.

Al momento todos los cuerpos ya fueron reconocidos por Medicina Legal del Ecuador. (HA)