Por sus fechorías  la llaman “La pareja del terror”. Un hombre y una mujer han sido captados por cuatro cámaras de seguridad mientras robaban en locales comerciales. Ellos andan en una motocicleta, se bajan y al instante, con un arma de fuego, atemorizan a sus ‘presas’ y les roban sus pertenencias.

Una de las víctimas relató que el domingo 24 de enero se hicieron pasar como clientes e ingresaron a su local de comidas ubicado en la ciudadela Colinas de la Alborada, en el norte de Guayaquil. “Esta pareja de ladrones llegó en una moto. Primero ingresó el individuo, luego la chica. Él se acercó a la caja, tomó una foto con su celular, sacó un arma con la que apuntó a mi esposa. Su acompañante recibía las indicaciones, quitaba las pertenencias a las otras personas que se encontraban en el negocio”, manifestó el perjudicado.

El afectado recordó también que el antisocial llevaba una gorra negra, vestía camiseta blanca y mascarilla del mismo color “lo que casi no permitía ver su rostro”. Mientras que su cómplice,  era una mujer delgada, de baja estatura y tez trigueña, llevaba un buzo y cubría su rostro con una máscara.

Otros atracos

Esta pareja, además, está implicada en el robo a un local de comida situado en la ciudadela Alborada (norte del Puerto Principal). En la grabación se observa cuando ambos someten a un comensal.

Los pillos también fueron captados mientras asaltaban a un transeúnte en otro sitio del norte de la ciudad. El individuo se baja de la moto, mientras que su compinche lo aguarda en el liviano vehículo. En otra filmación la pareja fue registrada robando a varias personas que se encontraban en un parque.

Intensa búsqueda de lo pillos

El capitán Ángel Reino Abarca, jefe subrogante de la Sidprobac, aseguró que la policía trabaja en la identificación y ubicación de estos delincuentes que tienen atemorizando ese sector de la ciudad.

“Es una pareja que se dedica a la modalidad asalto y robo, utiliza un arma de fuego para atemorizar a sus víctimas y una moto para huir. De la información que se tiene realiza sus fechorías en el norte de Guayaquil. Tendría entre 25 a 30 años”, informó el uniformado.