El policía que fue atacado a tiros por un repartidor motorizado en el norte de Quito trabaja en la cápsula de seguridad de un juez vinculado al caso Metástasis.

Este proceso judicial, liderado por la Fiscalía General del Estado, ha implicado a varios funcionarios públicos y operadores de justicia supuestamente relacionados con el narcotráfico. Actualmente, el caso ha superado la etapa de juzgamiento, con más de 30 personas sentenciadas.

El día del ataque, el policía, de 23 años y perteneciente a la Dirección Nacional de Seguridad y Protección (DINPRO), se dirigía en su motocicleta a la Corte Nacional de Justicia, ubicada en el sector de Iñaquito, en la zona financiera de la capital.

¿Cómo ocurrió el ataque?

Sin embargo, a dos cuadras de su destino, cerca del Colegio de Contadores Públicos de Pichincha, observó a un sujeto en una moto de repartidor que aparentemente intentaba robarle el teléfono a una transeúnte.

Al ordenarle que se detuviera, el sospechoso ignoró la indicación y huyó, desatando una persecución. Cuando el policía logró interceptarlo y descendió de su vehículo para solicitarle documentos y revisar sus pertenencias, el motorizado sacó un arma de fuego y disparó contra él.

El uniformado respondió al ataque y corrió a buscar refugio para evitar ser herido. En ese instante, el delincuente aprovechó para arrojar el revólver y escapar en la motocicleta.

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¿Cuáles son las evidencias del caso?

Horas más tarde, agentes del distrito Eugenio Espejo ubicaron un vehículo con las mismas características en la intersección de la avenida América y Mañosca, cerca de una lavadora.

Al revisar la motocicleta, los policías notaron que la placa no coincidía con el número de chasis del motor.

Por ahora, el atacante sigue prófugo. Personal de la Policía Judicial revisa las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona para identificarlo. a para identificarlo.

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