Los sujetos detenidos luego de que supuestamente dispararan en contra de los policías que terminaban su turno en el retén de La Pulida, en el norte de la capital, fueron procesados por la Fiscalía General del Estado.

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Se inició una instrucción fiscal en su contra por el delito de terrorismo, la misma que durará 30 días. El juez de flagrancia decidió que uno de ellos recibiera prisión preventiva, mientras que el otro deberá presentarse ante las autoridades tres veces por semana y no podrá salir del país.

Además, el fiscal del caso solicitó medidas de protección para los dos policías que fueron víctimas del atentado. Estas fueron otorgadas por el juez, quien prohibió a los detenidos acercarse a las víctimas o a sus familiares, por sí mismos o por terceras personas.

Luego de que los sospechosos, la noche del 21 de enero del 2024, dispararan a los policías fueron perseguidos y uno de ellos recibió un tiro en el brazo derecho.

Mientras los uniformados realizaban un operativo para ubicar a los pistoleros recibieron una alerta del ECU 911 de que una persona reportó a un herido de bala. Los gendarmes fueron a la dirección de donde salió la llamada y ubicaron un taller mecánico.

El propietario del establecimiento les hizo pasar y los policías hallaron la motocicleta en la que habría estado el delincuente herido y su pistola.

Luego, el dueño del taller se puso nervioso cuando le preguntaron quién dejó el vehículo y este respondió que habría sido su hermano, quien fue llevado al hospital. Allí, los policías lo reconocieron como el que había atentado contra ellos y vieron que junto a él estaba su compinche. 

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