El policía está sentado en el pavimento de la avenida Simón Bolívar, en Quito. Entre sus brazos está un niño. Él, vestido con el uniforme, sostiene con su mano derecha un celular… minutos antes había ocurrido allí un accidente de tránsito.

La imagen ha conmovido en las redes sociales, tanto que incluso la ministra de Gobierno, María Paula Romo, escribió este 11 de julio de 2020 en Twitter que el gendarme “auxilió a la gente accidentada y vio que había un niño llorando. Lo tomó en sus brazos… le mostró vídeos para entrenerlo”.

Hasta entonces solo se sabía su nombre: Ramón Salazar. Pero aquella foto ya lo había convertido en héroe. Y EXTRA fue en su búsqueda.

Tiene 35 años. Lleva en la fuerza policial desde hace 15 años. Era profesor de educación física en la Escuela Policial. Durante la pandemia se ha dedicado a patrullar. Incluso estuvo un mes trabajando en Guayaquil. Y ahora el quiteño, quien vive en Yaruqui, cumple con sus labores en la capital.

Fue coincidencia. Cuando se iba a su casa, tras terminar su turno, pasó por donde había ocurrido el accidente la tarde del viernes cerca de Guápulo… Los usuarios de las redes también han resaltado el gesto de humanidad.

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