En Ecuador, los secuestros dejaron de ser hechos aislados y ocurren a plena luz del día, en calles transitadas, frente a los ojos de transeúntes y bajo la mirada impotente de cámaras de seguridad y celulares de ciudadanos que registran escenas de terror que antes parecían lejanas.

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La tarde del viernes 15 de agosto, un nuevo hecho estremeció a los habitantes de Guayaquil y Samborondón. Tres pasajeros que se movilizaban en un taxi fueron interceptados en el puente que conecta el sector de Sauces con la vía hacia Samborondón.

Según los primeros reportes, las víctimas habían abordado el vehículo en los exteriores de un centro comercial del norte de Guayaquil con destino a una urbanización privada. Sin embargo, su trayecto se vio interrumpido por hombres armados que bloquearon el paso. Un video aficionado muestra a dos de los pasajeros, ambos hombres, corriendo en sentido contrario al tráfico para escapar, mientras que una mujer fue obligada a subir a otro vehículo en medio de gritos y confusión.

La alerta la dio el propio taxista, quien mostró su carro con los vidrios destruidos y las pertenencias de los pasajeros esparcidas en el interior. Horas después, se conoció que los captores exigían medio millón de dólares como rescate por la liberación de la mujer.

La víctima permaneció cautiva en una urbanización privada en la vía a Daule durante dos días. El lunes, en un descuido de sus secuestradores, logró escapar: salió descalza, con una capucha en la cabeza y pidió auxilio en el sector.

La Policía desplegó un operativo que permitió la captura de cinco personas: una el domingo y las otras cuatro el lunes, todas en Guayaquil.

Una tendencia alarmante

Lo ocurrido no es un hecho aislado. Las estadísticas revelan un incremento sostenido del delito de secuestro en el país. En 2023 se registraron 1.372 casos; en 2024, la cifra subió a 2.095. Solo entre enero y julio de 2025 ya se han receptado 2.114 denuncias a nivel nacional, según datos de la Fiscalía.

Los meses con mayor número de denuncias fueron junio (328), julio (321) y mayo (322), evidenciando que la incidencia de este delito no se detiene.

De ese total, 811 denuncias corresponden a Guayaquil, lo que representa el 38,36 % de los casos en el país. Esta ciudad se ha consolidado como el epicentro del secuestro en Ecuador.

Denuncias de secuestro en Ecuador (enero – julio 2025)

• Enero: 308

• Febrero: 288

• Marzo: 276

• Abril: 271

• Mayo: 322

• Junio: 328

• Julio: 321

Denuncias de secuestro en Guayaquil (enero – julio 2025)

• Enero: 139

• Febrero: 112

• Marzo: 95

• Abril: 99

• Mayo: 124

• Junio: 119

• Julio: 123

Espacios antes seguros, hoy vulnerables

El caso del último fin de semana expuso no solo la crudeza del delito, sino también la vulnerabilidad de espacios que hasta hace pocos años eran considerados seguros o incluso blindados. La interceptación ocurrió en un puente transitado y la víctima fue llevada a una urbanización privada, escenarios que antes representaban refugio frente a la violencia.

Los videos captados por ciudadanos y difundidos en redes sociales se han convertido en testigos incómodos de una violencia que avanza sin freno. Cada grabación revela lo que las cifras confirman: el secuestro ya no distingue horario, lugar ni condición social.

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