Con siete impactos de bala fue asesinado Javier Eduardo Ganán, de 27 años de edad. La víctima, según fuentes policiales, llegó a su casa en el Campamento 5 de la ciudadela Xavier Marcos en Naranjito, sin imaginar que su verdugo estaba al acecho.

El reloj marcaba las 21:00 del viernes, cuando el silencio de la zona se vio interrumpido por el ruido de las detonaciones del arma de fuego. Cuando los moradores salieron de sus hogares para verificar la procedencia de los disparos, divisaron a un sujeto que salía a precipitada carrera, dejando sobre la calle el cuerpo sin vida de uno de sus vecinos.

Ganán no tuvo oportunidad de salvarse. Los disparos fueron mortales y uno de ellos, se presume, estuvo dirigido a la cabeza.

El responsable de su muerte abordó una motocicleta que lo esperaba en la esquina con otro tipo y huyeron con rumbo incierto. Minutos después, tras un barrido realizado por la Policía Nacional, encontraron el vehículo abandonado en un sector conocido como Las Cañitas. Los agentes también hallaron prendas de vestir, presuntamente, de quien disparó contra la humanidad del joven.

Mientras tanto, en el lugar de los hechos, se vivieron momentos desgarradores por parte de los familiares de la víctima. Ellos evitaron cualquier tipo de pronunciamiento. Por su parte, los agentes que investigan el caso revisaron en su base de datos y confirmaron que el occiso registra dos detenciones.

Una vez realizas las pericias en el sitio, el cadáver fue llevado a la morgue, mientras que la moto y la ropa que presuntamente usaba al verdugo, serán respectivcamente analizadas.

Aunque no se han establecido las causas de este hecho violento, existe una primera hipótesis que apunta a un ajuste de cuentas por tráfico de droga. Sin embargo, eso lo confirmará o descartará el proceso investigativo.