Una noche de deporte en cuestión de segundos pasó a ser de una práctica de indor-fútbol a ‘indor-bala’. En la cancha no hubo goles, sino plomo y posteriormente como resultado un muerto y dos heridos.

Eran aproximadamente las 21:00 del lunes 20 de diciembre cuando el peloteo fue frenado por una ráfaga de disparos. Los tiros dejaron en el suelo a uno de los asistentes, bañado en un charco de sangre, mientras que otros dos fueron rozados por los disparos.

La cancha del barrio La Victoria, ubicada en la calle 109 y avenida LV1, en Manta, provincia de Manabí, se convirtió en el escenario del violento acontecimiento.

El más afectado, identificado como Samy Segundo Roldán Zambrano de 23 años, fue trasladado por parte de allegados hasta la clínica Los Esteros, donde los médicos solo confirmaron su fallecimiento.

En las afueras de este nosocomio se formó un alboroto. Los deudos lloraban desconsolados, gritaban y se abrazaban. No podían creer lo que había sucedido.

La Policía Nacional, a través de sus unidades especializadas de Criminalística y Dinased, llegó hasta la cancha de La Victoria y con la ayuda de linternas trataban de verificar la existencia de indicios balísticos.

Según las primeras diligencias y versiones emitidas por los lugareños, sujetos desconocidos llegaron en un vehículo Grand Vitara. Uno de ellos descendió y disparó sin piedad contra Roldán. Al menos con 7 tiros ejecutaron los sicarios a su víctima.

El padre de Samy contó que su hijo hace dos meses habría sido amenazado de muerte. “Estaba sentado junto a sus amigos y allí llegaron a darle directamente a él”, lamentó. (AG)