La Policía de Santa Elena está tras los pasos de los sujetos que terminaron con la vida de Luis Alfredo Caicedo Obregón, de 31 años, conocido como Negro Allende, quien fue asesinado en el barrio Los Girasoles, en el puerto de Chanduy, de la provincia de Santa Elena.

Los investigadores indagan la identidad de un individuo que fue a llamar a la víctima para que salga del inmueble donde se encontraba la tarde del jueves 28 de octubre. Cuando Allende llegó a la puerta de la casa le descargaron cuatro tiros. Dos de los perdigones le impactaron en el pecho, su muerte fue instantánea.

Se conoció que Caicedo acudió al lugar a pelar pollos y demoró alrededor de diez minutos para salir. Lo hizo ante la insistencia del individuo que a cada rato le pedía conversar en la calle, pues supuestamente tenía que darle algo. “Ese tipo lo entregó, al parecer era su amigo”, comentó uno de los parientes del occiso.

El sospechoso es conocido en el sector, por lo que los uniformados esperan obtener más detalles y determinar si este sujeto es cómplice de los sicarios o si se trató de un hecho casual.

También se espera conocer la procedencia de una moto de placa JD324H, en donde se movilizaban los presuntos asesinos.

El pequeño vehículo quedó abandonado al pie del sitio donde ocurrió el hecho de sangre.

Según dijeron testigos, los sicarios tuvieron que huir a pie por un desperfecto mecánico que se les presentó. “Se les trabó la cadena, por eso dejaron la moto. Se fueron a la carrera, nadie los siguió porque andaban armados”, dijo entre lágrimas una mujer que se encontraba el sitio del crimen.

Con Caicedo suman tres las muertes violentas ocurridas en los dos últimos meses en esta población. El 7 de octubre fue asesinado el guayaquileño Yordi Litardo. El 29 de agosto fue encontrado muerto Erick Lindao. Los investigadores buscan establecer si los tres hechos de sangre están relacionados.